Un nuevo escándalo vuelve a sacudir el basket griego. Cuando las miradas estaban puestas en el futuro del Olympiacos y en su posible ausencia de la liga de cara a la próxima temporada, sale a la luz un presunto caso de violencia protagonizado por el exjugador Manolis Papamakarios.
Su expareja Manto Tzavaras ha compartido en su cuenta de Facebook unas fotos en las que muestra los resultados de la presunta paliza que recibió por parte del que fuera escolta del Lagun Aro Gipuzkoa y Montakit Fuenlabrada. En las imágenes se ve un rostro hinchado por los golpes y cubierto de sangre por las agresiones.
No obstante, según Manto Tzavaras no es la primera vez que esto ocurre. La expareja de Papamakarios le acusa de haberla golpeado en varias ocasiones e incluso de haberla dañado con un cuchillo, además de haber provocado que perdiera el hijo que esperaban a raíz de una patada en la tripa que le propinó el pasado mes de enero.
Una larga lista de agresiones y acusaciones que colocan al exjugador en el punto de mira. Actualmente, ejerce de entrenador ayudante y responsable de las escuelas de baloncesto del Ifestos Limnou de la primera división griega. Asimismo, también desempeñaba el cargo de presidente de la asociación de jugadores de Grecia, del que ha dimitido tras el escándalo que estalló el pasado martes.
[Más información en: La liga griega desciende a Olympiacos: solo jugará con profesionales en la Euroliga]
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