La NBA, como cada verano, se puede convertir en una auténtica revolución de plantillas que buscan un nuevo proyecto. Algunos, a corto plazo, intentando fichar estrellas si tienen margen salarial para sueldos potentes para intentar trazar el camino más corto posible hasta el anillo. Y otros, desprendiéndose de sus estrellas para intentar crear un proyecto de futuro, como parecen querer los Houston Rockets.
El equipo de Mike D'Antoni fue barrido por los Los Ángeles Lakers en semifinales de conferencia por un resultado de 4-1. Lo cierto es que el equipo de LeBron James, Anthony Davis y compañía pasó por encima a los Rockets y no les dio opción alguna de intentar pelear la serie, lo que ha traído numerosas críticas.
Muchos han apuntado que esa derrota suponía el fin de un modelo, el del small-ball de los Rockets, que había sido claramente derrotado por el poderío físico de jugadores como el propio LeBron o Anthony Davis, que no tuvieron rival cuando se acercaban a la pintura. Sin embargo, la revolución podría no quedarse solo ahí.
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Todas las informaciones que salen de la franquicia de Houston aseguran que va a haber cambios muy grandes en la plantilla, y los primeros apuntaban hacia jugadores de la talla de Russell Westbrook o Eric Gordon, dos de los pilares del equipo y dos estandartes de este último intento de los Rockets por llegar, al menos, hasta las finales de conferencia, algo que no han logrado desde que aterrizase su mayor estrella, James Harden.
'La Barba' llegó a Houston hace 8 años procedente de uno de los mejores equipos de la historia reciente de la NBA. Allí despuntó junto a unos jóvenes Westbrook, Durant e Ibaka en lo que fue uno de los equipos más queridos de la liga, pero que no consiguió culminar el sueño del anillo, lo que provocó la desbandada de estrellas.
De hecho, dos de los jugadores que salieron de ese 'Big Four' encontraron el éxito fuera. Kevin Durant se coronó campeón con los Golden State Warriors de Stephen Curry, Klay Thompson y Draymond Green en lo que fue otro equipo de ensueño y lo que reportó críticas al alero estadounidense.
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El otro jugador que consiguió enfundarse el mítico anillo de la NBA fue Serge Ibaka, que se proclamó campeón de la liga junto a Marc Gasol y Kawhi Leonard en los Toronto Raptors, antes de que este partiera rumbo a los Clippers. Por lo tanto, los únicos dos jugadores que siguen sin saborear las mieles del éxito son los dos que se han reunido en Houston.
La revolución de los Rockets
Por ello, los Rockets estarían pensando en llevar a cabo una reconstrucción que sacudiese el mercado por completo. Tal y como ha transmitido el periodista Eric Pintus, de Bleacher Report, un ejecutivo de la Conferencia Este habría transmitido la idea de que los Rockets estarían pensando seriamente en un traspaso de James Harden, su máxima estrella, uno de los mejores anotadores de la historia y el jugador que les asegura presencia en los playoffs y cuota de pantalla en la televisión nacional.
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De producirse, podría suponer una sacudida terrible al mercado ya que el equipo de Houston tendría hueco para fichar a alguna estrella e intentar crear un nuevo proyecto a base de jugadores jóvenes y con gran futuro, mientras que Harden podría recalar en alguna franquicia con opciones de anillo formando un equipo temible.
Además, algunas franquicias de la NBA aseguran que ya han preguntado por la situación de 'La Barba' y no han recibido una respuesta por parte de Morey de que el jugador siga siendo intocable como lo ha sido todos estos años, así que la reconstrucción de los Rockets con las salidas de Harden y Westbrook podría estar gestándose.
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