Shaquille O'Neal ha sido uno de los mejores jugadores de baloncesto de las últimas décadas, pero también uno de los personajes más llamativos y particulares. Sus hazañas fuera de la pista daban casi tanto que hablar como sus logros dentro del parqué. Además, siempre ha tenido un olfato especial para los negocios, algo que no le ha hecho olvidarse nunca de los más desfavorecidos.
Ahora que ya no juega al baloncesto, a pesar de que ha vuelto a ponerse en forma, y de que pasa más tiempo en los platós de televisión que en cualquier otro sitio, ha recordado una anécdota de su carrera que pocas personas conocen y que habla muy bien de su grandeza como persona. Todo por romper un contrato de 40 millones de dólares con la marca deportiva Reebok.
A Shaquille le escribieron desde esta compañía para hacerle una oferta que era casi irrechazable y que él mismo tenía casi firmada. Un contrato de cinco años a razón de ocho millones por curso por llevar zapatillas Reebok durante una de las mejores etapas de su carrera deportiva. Sin duda, un gran negocio para él.
Pero cuando estaba a punto de dar el sí definitivo, un suceso con una aficionada le hizo cambiar drásticamente de opinión, algo que ha desvelado ahora en Full Send Podcast. "Tuve un contrato con Reebok de 40 millones por cinco años. Y un día cuando salía de la cancha una señora empezó a increparme diciéndome cosas como '¡Ustedes, amigos, son los culpables de que les cobren a estos niños tanto dinero por las zapatillas!".
Ese episodio le hizo reflexionar rápidamente y 'Shaq' decidió dar marcha atrás a ese acuerdo para incredulidad de la propia marca y de sus agentes, que no entendían cómo podía rechazar una propuesta tan jugosa por algo que, en definitiva, hacían todas las grandes estrellas del baloncesto e incluso del deporte.
Sin embargo, O'Neal se paró a pensar en las palabras de aquella aficionada, probablemente una madre que sufría para comprarle a su hijo o hija las zapatillas que quería para jugar al baloncesto como lo hacían las grandes estrellas: "Pensé en ello. Yo estaba como, 'Sabes que tiene razón'. Así que ese día, corté lazos con Reebok. Los llamé y les dije: 'Quédense con el dinero. Esto no está bien. No quiero que haya pelea. Seguiré usando sus zapatillas durante lo que resta de temporada, pero encontraré mi propia forma de hacerlo mejor".
El cambio de 'Shaq'
En ese momento decidió dar un giro a la propuesta que le habían hecho y comenzó a negociar con la marca Walmart para comenzar a fabricar zapatillas de bajo coste y accesibles a un mayor público. Aquel cambio, que rompía claramente con la política de marcas como Nike, Adidas o la propia Reebok, supuso un cambio en la industria cercana a la NBA y en su vida.
Desde entonces, 'Shaq' no ha dejado de mostrar su habilidad para los negocios y su predisposición a la hora de ayudar a los más desfavorecidos a quienes se acerca cada vez que puede. Conocidos son algunos de sus episodios que han ido desde pagar el entierro de una persona sin recursos hasta donaciones de comida y dinero para personas indigentes y obras benéficas, siempre intentando estar al lado de los más necesitados.
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