El FC Barcelona cumplió con los pronósticos y venció a Olympiacos en la final de consolación de la Final Four de la Euroliga. Los de Sarunas Jasikevicius tuvieron el control del choque en todo momento, aunque pasaron apuros con la remontada del conjunto griego en el tercer cuarto. Una situación que ya vivieron ante el Real Madrid. [Narración y estadísticas: FC Barcelona 84-74 Olympiacos].
Un triunfo que no sirve para quitar el mal sabor de boca de la derrota ante los blancos en las semifinales, pero que al menos les vale para llevarse un buen recuerdo de su paso por Belgrado tras quedarse fuera de la pelea por el título. Nikola Mirotic, con 19 puntos, y Nick Calathes, que se fue hasta las 13 asistencias, fueron los mejores por parte de los azulgranas. Sasha Vezenkov, que aportó un doble-doble de 20 puntos y 11 rebotes mantuvo las esperanzas de remontada de Olympiacos casi hasta el final.
Premio menor para los de Sarunas Jasikevicius este tercer puesto en la Euroliga de haber terminado en la primera posición de la fase regular y como el equipo más en forma. Sin embargo, en el momento de la verdad, los azulgranas demostraron que les sigue faltando un puntito para levantar una corona que llevan más de una década sin disfrutar.
Al menos, ante Olympiacos sí mostraron de nuevo su mejor versión en un partido que fue de todo menos una final de consolación. La intensidad que le pusieron ambos equipos fue increíble y llamó la atención en todo momento. Finalmente, el Barça consiguió abrir hueco en el electrónico para tener un desenlace de encuentro tranquilo. Momento ya de pensar en los playoffs de la Liga Endesa que comienza la próxima semana.
Buena salida del Barça
El Barça arrancó muy bien el choque con un parcial de 10-2. Parecía que iba a ser un encuentro sin historia y que quedaría resuelto por la vía rápida. Pero los de Georgios Barztokas no se rindieron y se pusieron el mono trabajo para remar hasta reducir la diferencia. Tanto es así que el final del primer cuarto volvió a vivirse con un marcador apretado de 20-18 para los azulgranas.
El choque estaba teniendo mucho ritmo desde el principio. Ambos conjuntos se empleaban a fondo en ataque, pero el hecho de que no hubiera en juego más que la honra, provocaba que la implicación defensiva no fuera ni mucho menos la misma. Eso sí, lo que no se ganó en seriedad se ganó en espectáculo.
Olympiacos muere en la orilla
Con Nick Calathes a los manos y con buenos minutos de la pareja interior formada por Sanli y Brandon Davies, el Barça terminó mejor la primera mitad. Fue capaz de subir su nivel defensivo y le hizo pasar a Olympiacos por sus peores minutos sobre el parqué. Sin embargo, llegó ese temido tercer cuarto y el Barça volvió a decaer. Sasha Vezenkov se puso la capa de héroe y lideró la resurrección del equipo de Barztokas, que parecía otro completamente al que se había podido ver en el final del segundo cuarto.
A pesar de que el Barça había conseguido controlar la situación en el arranque del tercer acto, manteniéndose siempre con rentas superiores a los 10 puntos, el buen trabajo del equipo heleno bajo los tableros y en lanzamiento exterior permitió que la renta se redujera hasta los cuatro puntos.
El último cuarto dejó un bonito intercambio de golpes que mantuvo siempre al Barça por delante a pesar de que se pudieron ver algunos momentos de dudas en los de Jasikevicus. Finalmente, la figura de Nikola Mirotic, el mejor como ante el Real Madrid, terminó decantando la contienda para tener unas últimas posesiones sin historia.
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