El Barça lo tenía muy claro. Tenía que cerrar la fase regular de la Euroliga ganando para tratar de auparse hasta la segunda plaza y desbancar así al Real Madrid. Después ya esperaría rival para los cuartos de final de la máxima competición continental, pero eso ya era cosa del resto y los de Jasikevicius tan sólo querían cerrar este tramo con buenas sensaciones.
Lo consiguieron. Vencieron al Valencia Basket pese a que en el inicio los visitantes plantaron cara y avisaron de que podían dar más guerra de lo esperado, pero poco a poco se fueron apagando. Era lógico por otra parte, porque los valencianos llegaban ya a este último encuentro de la fase regular sin nada en juego y para ellos esto no era otra cosa que un puro trámite.
El Barça encontró la manera de, con trabajo y acierto, encauzar el partido poco a poco. En ello tuvo mucho que ver un sensacional Álex Abrines, que cosió a triples al Valencia Basket con una muñeca impresionante, y también Mirotic, que con sus 18 puntos se convirtió en el máximo anotador del partido.
Satoransky se lleva el balón ante un rival del Valencia Basket.
Los culés tuvieron que esperar varios minutos en el vestuario para conocer el resultado de otros partidos y saber así quién iba a ser su rival en las eliminatorias. Se medirán al Zalgiris después de que los lituanos consiguieran una victoria de incalculable valor en la cancha del Bayern. Un partido loco en su final y que mantuvo en vilo a varias aficiones.
Intercambio de golpes
El Valencia llegaba sin presión al Palau y eso se notó en los instantes iniciales. Durante los primeros minutos se produjo un intercambio de golpes en el que comenzaron mandando los valencianos. Sin embargo, el Barça vio que en el juego interior era infinitamente superior y sacó tajada de la actuación de Vesely para darle la vuelta al marcador y distanciarse hasta los 10 puntos.
La otra gran estrella fue Mirotic. 12 puntos sin un solo fallo dispararon a los culés, aunque el Valencia Basket tocó las teclas, reajustó su juego interior y se resistió a marcharse del partido antes de tiempo. Rivero y Dubljevic volvieron a meter a los suyos en el partido al final del primer cuarto (24-21), aunque en el segundo parcial se desató el juego exterior del Barça con Tobey, Satoransky y Abrines para estirar la renta.
Era un tira y afloja, y en estas Mumbrú volvió a parar el partido para que los suyos reaccionaran, algo que mandó el choque abierto al descanso (51-46). Tras la reanudación los de Jasikevicius pasaron a dominar el rebote, un elemento diferencial que comenzó a abrir la brecha de nuevo a los dobles dígitos al término del tercer cuarto, algo que ya fue mortal para el Valencia.
Un lance del partido en el Palau.
Los visitantes no pudieron reducir las diferencias y el Barça tan sólo tuvo que administrar la ventaja para llevarse la victoria. Se marchó al vestuario y allí conoció que el Zalgiris será su rival en los cruces de la Euroliga.
Barça 85-71 Valencia Basket
Barça: Satoransky (7), Laprovittola (4), Abrines (15), Mirotic (18), Vesely (13) -equipo inicial-, Sanli (9), Kalinic (2), Higgins (5), Tobey (5), Kuric (3), Jokubaitis (4) y Nnaji (-).
Valencia Basket: Harper (14), Jones (9), Puerto (-), Claver (6), Alexander (6) -equipo inicial-, Pradilla (7), Webb III (7), Radebaugh (7), Evans (4), Dubljevic (5), Hermansson (-) y Rivero (6).
Parciales: 24-21, 27-25, 21-15, 13-10.
Árbitros: Sasa Pukl (ESL), Uros Nikolic (SER) y Luka Kardum (CRO). Sin eliminados.
Incidencias: partido de la trigésima cuarta jornada de la Euroliga disputado en el Palau Blaugrana de Barcelona ante 6.500 espectadores. Antes del pitido inicial, Alex Abrines recibió una camiseta conmemorativa tras haber alcanzado la semana pasada los 500 partidos como barcelonista.