El Real Madrid acaricia el título de la Liga Endesa. El conjunto blanco venció en el WiZink a UCAM Murcia y está a tan solo una victoria del campeonato. Un triunfo que podría llegar este mismo miércoles en el feudo del equipo murciano.
La afición blanca es consciente de que este puede haber sido el último partido de la temporada de su equipo como local y quiso aprovechar la situación para despedirse de Rudy Fernández, una de las mayores leyendas del Real Madrid.
El respetable madridista le regaló una ovación que duró más de quince minutos. Desde que se sentó en el banquillo a falta de dos para el final después de anotar una canasta que sentenció el choque hasta que se retiró de la pista una vez pasó por la zona mixta. Un cuarto de hora lleno de emociones a flor de piel y que incluso provocaron las lágrimas del legendario alero blanco.
Rudy Fernández tardo poco en romper a llorar. Chus Mateo le sentó en el banquillo y todo el público comenzó a corear su nombre. Él se levantó y agradeció el tributo de su afición llevándose en varias ocasiones su mano al escudo cosido sobre su camiseta blanca. Y rompió a llorar. Se tapó con una toalla, pero todo el mundo vio las lágrimas de un jugador sublime que estaba, posiblemente, ante sus últimos minutos como local en el Real Madrid.
Quien sabe si finalmente será la última vez que pise el parqué del WiZink Center en su carrera, pero lo que está claro es que Rudy hizo todo lo posible para que su última imagen fuera legendaria. Igual que él. Realizó un partido impecable. Anotó 14 puntos (el mejor del partido) y lo hizo sin fallar un solo lanzamiento. Cinco triples, cuatro canastas de dos y un tiro libre. Sin error y guiando al Real Madrid hacia un nuevo título de Liga Endesa.
El broche de oro
El partido frente a UCAM Murcia estuvo a la altura de lo que ha sido su carrera. 20 años llenos de éxitos y de momentos que jamás olvidará el bueno de Rudy. El de este lunes será uno de ellos.
Con el Real Madrid lo ha ganado todo. Desde la Liga Endesa hasta el Mundial de Clubes pasando por la Euroliga. Lo cierto, es que Rudy ha sido pieza clave en prácticamente todos, ya fuese a las órdenes de Pablo Laso o de Chus Mateo. De una manera u otra, siempre brilló. El club blanco le tendió su mano hace trece años después de su paso por la NBA y él ha devuelto el favor con un baloncesto sublime.
Como poco se marchará con 34 títulos en su haber. Con la selección se ha alzando con dos Mundiales, 4 Eurobasket, dos medallas de plata y otra de bronce en los Juegos Olímpicos. A nivel de clubes, destaca con 3 Euroligas, 6 títulos de Liga Endesa, 7 Copas del Rey, 9 Supercopas Endesa, una Copa Intercontinental, una Copa ULEB o un FIBA Eurochallenge.
A todo eso, hay que añadirle los reconocimientos individuales, que poco nos han sido. Ha sido tres veces MVP de la Copa del Rey y otros de la Supercopa de España o de la Copa ULEB.
El sueño de París
A Rudy Fernández le queda cerrar su etapa a nivel de clubes de la mejor manera posible. Tiene encarrilado un nuevo título de Liga Endesa, pero todavía tiene que rematar la faena. Si lo consigue, todavía le quedará un último servicio, aunque esta vez con la selección española.
Rudy Fernández siempre ha estado al pie del cañón cada vez que España le ha necesitado y ha rendido, en innumerables ocasiones, por encima de lo esperado. El alero se ha partido el lomo cada vez que se ponía la camiseta del combinado nacional y aspira a darle un último servicio antes de colgar las zapatillas.
De momento está en la lista del Preolímpico y superarlo es el primer paso hacia el sueño de París. Una medalla en la capital gala supondría el broche de oro a una carrera legendaria.
Además, cumpliría uno de los mayores deseos de su padre, ya fallecido. Una de mis prioridades es cumplir el sueño de mi padre, poder vivir un preolímpico e intentar clasificarnos y vivir unos JJOO. Por eso también estoy aquí, no quiero engañar a nadie. Pero quiero ganarme el sitio, poder estar entre los doce y que Sergio me llame como ha hecho todos estos años", explicó hace unos meses en una rueda de prensa.
Pase lo que pase, la carrera de Rudy Fernández es intachable. Sus jugadas quedarán para el recuerdo de todos los aficionados al baloncesto de la misma manera que él nunca olvidará una de las mayores ovaciones a un jugador del Real Madrid.