España continúa con paso firme su camino en el Preolímpico que está disputando en Valencia. A la victoria con autoridad sobre el Líbano le ha seguido un trabajo triunfo ante Angola que permite a los de Scariolo precintar como líderes el triangular ante Líbano y Angola y encarar las semifinales del playoff del Preolímpico donde ya esperan rival.
Scariolo torcía el gesto, el día que se convertía en bicentenario al frente de la selección, ante la repetida amenaza del un inclemente calendario. Segundo partido en menos de 24 horas en este Preolímpico que no deja de ser una maraña pese a los dos triunfos. Juancho cayó lesionado, la Fonteta no se llena y Bahamas en el horizonte.
Inconvenientes que, sin embargo, no frenan la ilusión de España por estar en los Juegos Olímpicos de París. El camino sigue sin torcercer, aunque cada vez es más sinuoso. La superioridad ante el Líbano en el primer partido se tornó en igualdad contra el cuadro angoleño en el segundo y en semifinales podría mantenerse este segundo intangible.
Los de Scariolo se enfrentarán por un puesto en la final contra Finlandia, que ha derrotado este jueves a Polonia. Los finlandes son un rival que obliga ponerse el mono de trabajo. No cuentan con su estrella Lauri Markkanen, pero juegan atrevido, con nombres combativos como Valtonen o Jantunen. En la final esperarían Bahamas o Líbano, presumiblemente la selección caribeña.
De esta forma, España se verá las caras contra Finlandia y se libra, por el momento, de una selección peligrosa como es Bahamas, sin mucho nombre, pero con un puñado de jugadores de la NBA que ya fue capaz de tumbar a Argentina en la carrera al Preolímpico.
España cuenta con el factor cancha, aunque cuando ha actuado como anfitrión, no ha tenido resultados satisfactorios. En la mente de todos está la final perdida ante Rusia en el Eurobasket 2007 o la eliminación frente a Francia en los cuartos de final del Mundial 2014, vengada un año después en las semifinales del Eurobasket 2015 en Lille.
Además, los precedentes para los anfitriones en los Preolímpicos tampoco son demasiado positivos. De los siete que se han disputado hasta ahora, tres para acceder a Río y cuatro a Tokio, sólo en una ocasión (Serbia en 2016) el anfitrión ha conseguido el billete. España tratará de romper con el maleficio.