El enfrentamiento entre los Houston Rockets y los Miami Heat de la NBA este domingo terminó en caos absoluto. Con apenas 35 segundos restantes en el último cuarto, Amen Thompson, de los texanos, y Tyler Herro, del equipo de Florida, protagonizaron un enfrentamiento físico que desató una pelea multitudinaria en la cancha.
La tensión se desbordó cuando Thompson derribó a Herro, lo que generó una acalorada reacción de sus compañeros y de ambos banquillos. La situación tardó varios segundos en ser controlada por los árbitros, liderados por Marc Davis, en el Toyota Center de Houston.
El saldo final de la trifulca fue la expulsión de siete personas: los propios Herro y Thompson, además del escolta de los Rockets Jalen Green, el técnico Ime Udoka, su asistente Ben Sullivan y, por parte del Heat, Terry Rozier. Además, previamente había sido expulsado Fred VanVleet por una situación aparte, cuando estableció contacto físico con el árbitro Davis tras una infracción de cinco segundos.
Herro, que fue una figura clave en la victoria de los Heat por 104-100, concluyó el encuentro con 27 puntos, seis rebotes y nueve asistencias antes de ser expulsado. Su tiro en salto a falta de 1:56 aseguró una ventaja que los de Miami mantendrían hasta el final.
Por su parte, los Rockets, terceros en la Conferencia Oeste, sufrieron su segunda derrota consecutiva pese a la destacada actuación de Dillon Brooks, con 22 puntos, y el doble-doble de Alperen Sengun, quien registró 18 puntos y 18 rebotes.
Explicaciones del árbitro
El árbitro principal, Marc Davis, explicó detalladamente las expulsiones al periodista Kelly Iko de The Athletic. Sobre VanVleet, señaló: "Después de la infracción de cinco segundos, VanVleet me contactó intencionadamente tras no concederle un tiempo muerto. Según las reglas, fue expulsado". Respecto a Ime Udoka, añadió: "El entrenador fue expulsado por comentarios antideportivos hacia mi persona".
En cuanto a la pelea, Davis justificó las sanciones: "Thompson golpeó y agarró a Herro, quien respondió. Ambos fueron expulsados por faltas de pelea. Green y Rozier también intensificaron el altercado, mientras que Sullivan recibió una técnica y fue expulsado por sus comentarios".
La NBA ahora deberá decidir las sanciones correspondientes, y se espera que los implicados enfrenten multas severas. Estas peleas son un golpe a la imagen de la liga, que tradicionalmente ha actuado con mano dura en este tipo de situaciones. Una cosa es segura: varios jugadores tendrán que asumir las consecuencias de su comportamiento antideportivo.