LeBron James es un fenómeno de masas allá por donde va. El reciente fichaje de Los Angeles Lakers abandonó Cleveland tras haber militado en los Cavaliers durante tres temporadas, con los que logró un anillo de campeón en el año 2016. Pero tras su marcha a la costa oeste la competitividad de los Cavs ha caído en picado, y en sus cinco partidos desde que comenzó la NBA no han logrado ninguna victoria.
Pero la cosa no acaba ahí, ya el número de aficionados que acuden Quicken Loans Arena también se ha visto reducido considerablemente. Tanto es así que desde la franquicia de Ohio han decidido bajar los precios de sus entradas de manera sorprendente.
Según se puede ver en una página de venta de entradas, una localidad para ver a los Cleveland de Kevin Love, Kyle Korver o JR Smith contra los Brooklyn Nets rondan los 2 dólares, una cantidad al alcance de cualquier bolsillo.
Las entradas rondaban este precio en la web Flash Seats una hora y media antes del encuentro entre ambos equipos. A modo de comparativa, la butaca más barata para ver el encuentro entre los Lakers y los Nuggets no bajaba de los 80 dólares.
Y no es para menos, ya que su protagonismo a nivel televisivo también ha caído de forma estrepitosa. De 39 partidos que con LeBron en sus filas se transmitían a nivel nacional ahora son solo siete. En el otro lado de la moneda están Los Angeles Lakers, que protagonizarán 43 partidos en antena.
LeBron ya triunfa en los Lakers
Año nuevo, vida nueva. Nadie dijo que la marcha de LeBron James a Los Angeles Lakers fuera fácil, pero el alero de Akron ya va carburando con la camiseta púrpura y oro. James fue el gran protagonista en la victoria del equipo californiano la pasada madrugada ante Denver (121-114), la segunda consecutiva.
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