María Ferreira González, vecina de O Porriño, salió el sábado por la mañana de su casa con la intención de despedir a Contador. Se celebraba la penúltima etapa de la Vuelta a España, con final en el Angliru, y se despedía, al mismo tiempo, el que ha sido el segundo mejor ciclista de la historia de España. Por lo tanto, para ella, era el día soñado para aunar sus dos pasiones: practicar deporte y pasar la jornada de ciclismo en compañía de los suyos. Y esa, decimos, era su intención. La joven, de 29 años, cerró con llave su casa y se dirigió hasta allí, pero no consiguió ver al pinteño subido en una bicicleta.



A eso de las 12, según relata el Faro de Vigo en su página web, se produjo el fatal desenlace que marcaría el día. María Ferreira llegó para ver la etapa subida en su bicicleta, pero perdió el control de los frenos en una de las zonas donde hay más pendiente de todo el puerto, en la zona de Cueña les Cabres (el desnivel llega hasta el 23%) y chocó contra un muro. Fue llevada al Hospital de Asturias en Oviedo, pero los servicios médicos no pudieron hacer nada por salvarle la vida.



María fue atendida en la propia montaña, donde le diagnosticaron traumatismo craneoencefácico y politraumatismos con pronóstico grave. Fue llevada en avión hasta el Hospital de Asturias y, a pesar de todos los esfuerzos realizados por los médicos del hospital, no le pudieron salvar la vida.



En el Club de Atletismo Porriño la despidieron con un mensaje de Facebook el domingo, una vez conocido en fatal desenlace. “No sabes cuánto cuesta digerir de forma tan repentina una noticia tan desagradable. Llevamos, con este, dos episodios muy duros y, de verdad, tenemos que decir que no nos sienta nada bien tanto dolor y desolación. Ocurrió hace un par de años, y ahora vuelve a ocurrir con nuestra compañera María Ferreira. Aplazaremos todas nuestras actividades de inicio de temporada al lunes, porque no tenemos fuerzas para más. Muchísimo cariño a toda su familia y a nuestros compañeros de Runners Pontakas (al que ella pertenecía) de parte de sus compañeros del club de atletismo Porriño”, escribieron como pésame.



María Ferreira vivía con sus padres en la urbanización El Sol y era hija única. Trabajaba como profesora de infantil en el Colegio Santo Tomás y era licenciada en INEF (Ciencias del Deporte y la Actividad Física). Era deportista, corría, practicaba triatlón y pertenecía al Club Natación Máster de Mos y al Runner Puntakas, que también la despidió con otro mensaje en Facebook: “Todas nuestras zancadas siempre correrán por ti. Tu sonrisa estará en el corazón de cada uno de nosotros. Siempre”, reza el mensaje de apoyo del club. Además, la joven de 29 años había ganado varias carreras, como la Correndo por Oursense, la carrera popular de Carballedo o la San Silvestre de Castrelo, según publica el Faro de Vigo. La noticia de su fallecimiento dejó helados a todos, que en las últimas horas siguen mostrando sus condolencias a su familia y a su pareja.

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