Los favoritos y los tapados en La Vuelta ante las grandes ausencias

El 25 de agosto en Málaga comienza la 73ª edición de La Vuelta a España. Una carrera que, como cada año, viene precedida por un exhausto Tour de Francia que cada vez se antoja más duro para las piernas de los ciclistas.

Esto, sumado a la proximidad de los Mundiales de Innsbruck con la celebración de la ronda española, ha provocado que un gran número de corredores hayan renunciado a su participación en la última Grande de la temporada.

Landa y el vacío en el Sky

Corredores de talla mundial como Chris Froome, tras participar en Giro y Tour, ya han declarado que no iban a participar. Pero es que el Sky es uno de los equipos que más bajas tendrá en La Vuelta, pues el último campeón del Tour de Francia, Geraint Thomas, tampoco tomará la salida en Málaga y ha optado por correr junto a su compañero el Tour de Gran Bretaña. 

Pero es que a estas bajas se une también la de un Mikel Landa que ha hecho todo lo posible por llegar a La Vuelta en perfectas condiciones. Sin embargo, esto se antojaba una misión imposible desde el principio. El corredor vasco sufrió una caída en la Clásica de San Sebastián que provocó una fractura vertebral que, finalmente, no ha podido superar.

Los capos del pelotón en La Vuelta

Por tanto, estas bajas dejan el camino libre a los otros favoritos y a un conjunto de tapados que han aumentado sus opciones de victoria en la ronda española considerablemente. La Vuelta pierde en glamour, pero no lo hará en competitividad y estos nombres ofrecerán un espectáculo digno de una Grande.

Cuatro ganadores de La Vuelta tomarán la salida el próximo 25 de agosto. Además, casualmente, coincide con el grupo de favoritos para esta edición, en el que se encuentran Alejandro Valverde (2009), Vincenzo Nibali (2010), Fabio Aru (2015) y Nairo Quintana (2015).  No obstante, Il Squalo ha anunciado que irá "etapa a etapa" y no buscará la victoria final en Madrid debido a que aún está recuperándose de la caída que sufrió en el ascenso al Alpe d'Huez del pasado Tour. El gran objetivo del italiano será la preparación para asaltar el maillot arcoíris.  

Pero este grupo no es cerrado y hay dos corredores que comparten apellido que quieren hacerse un hueco. Se trata de los hermanos Yates, que han rozado ya el podio y tienen ganas de hacer algo muy grande. Dos ciclistas que cierran el clan de los candidatos y es ahora donde entran en juego los outsiders. 

Amplio abanico de tapados

Las mencionadas ausencias han provocado que otro grupo de corredores pueda presentar su candidatura a alzarse con La Vuelta. Una amenaza para el clan de unos favoritos que deben mantenerse alerta de cualquier movimiento que pueda haber en carrera. 

Esta edición está mucho más abierta que otras, en las que había que esperar con paciencia el virulento ataque de Alberto Contador o de Froome. Esta vez es diferente. Nombres como el de Richie Porte salen a la palestra como candidatos. Nadie les tiene en cuenta, pero tienen talento suficiente para desbancar a los Quintana, Valverde y compañía. 

Pero es que el australiano, que siempre ha tenido mala suerte en las vueltas de tres semanas, no es el único que advierte a los favoritos desde un escalón más bajo del pelotón. Miguel Ángel 'Superman' López también lleva un tiempo dejando claro que es un ciclista muy peligroso. Pero si a alguien hay que tener en cuenta de este selecto grupo del pelotón es a Thibaut Pinot. El francés ya ha dado más de un quebradero de cabeza y sabe lo que es pisar el podio de una Grande -quedó tercero en el Tour de Francia de 2014-. Un rival a tener en cuenta, sobre todo en las etapas de montaña. 

El abanico de outsiders lo cierran Rigoberto Urán y el irlandés Dan Martin. Dos corredores veteranos y expertos escaladores, aunque el colombiano también destaca por su buen hacer en las cronos. Además, Urán también ha probado las mieles de un podio en los Campos Eliseos, dado que en el Tour de Francia de 2017 subió hasta el segundo cajón. 

Cinco nombres que no han podido ganar ninguna Grande y que arden en deseos de hacer un papel excelso en la ronda española. La Vuelta no será tan descafeinada pese a la ausencia de los británicos y de Landa. Promete espectáculo del bueno en una edición que no tiene un favorito claro.