Jesús Herrada (Mota del Cuervo, Cuenca, 26 de julio de 1990) ha protagonizado el gran 'estacazo' a La Vuelta de España. El ciclista del Cofidis logró el maillot rojo antes de que el pelotón afronte un fin de semana decisivo para la carrera en las montañas asturianas. Todo hacía indicar que sería Simon Yates el que llegaría como líder, pero una escapada ha premiado el incansable esfuerzo de un corredor que dejó Movistar esta temporada para volar libre.
Después de siete temporadas en el conjunto telefónico, Jesús entendió, junto a su hermano José, que debía salir de la escuadra de Eusebio Unzué para encontrar su lucimiento personal. Con 28 años creía que era la oportunidad perfecta para poder gozar de libertad en carrera tras muchos años al servicio de Alejandro Valverde y Nairo Quintana.
Los Campeonatos de España logrados en 2013 y 2017 son sus mayores victorias en su ya larga carrera profesional. Ahora, sumará también el liderato que ha conseguido en La Vuelta gracias a una fuga camino de Estaca de Bares. Además, el conquense es uno de los favoritos para ocupar un hueco en la lista del seleccionador, Javier Mínguez, para el Mundial de Innsbruck. El exdirector de BH, Amaya y Vitalicio Seguros entre otros, siempre ha definido a Herrada como un "hombre con mucha clase" y que sabe "colocarse bien en carrera". En el último Europeo se metió en el corte bueno, pero se quedó con la miel en los labios al finalizar cuarto y tuvo que conformarse con la medalla de chocolate.
El Cofidis es el único equipo extranjero invitado a La Vuelta y que de momento ha cumplido el expediente con matrícula de honor. Bouhanni se llevó la sexta etapa al esprint y ahora Herrada lucirá el maillot rojo cuando ya la carrera ha pasado su ecuador y afronta su tramo clave para el triunfo final. Jesús definió su fichaje por el equipo galo "como un reto". Quería luchar por etapas en las grandes vueltas y disfrutar de la presión de no tener que trabajar para un compañero. En la jornada de descanso en Salamanca ya avisaba de que atacaría esta semana y lo cumplió. No se llevó el premio del triunfo de etapa, pero sí un liderato que ahora quiere aguantar el máximo tiempo posible.
Herrada no lo tendrá fácil, ya que las tres próximas jornadas terminan en alto con La Camperona, Les Praeres y Los Lagos de Covadonga. El español quiere ir día a día. Tiene una ventaja de 3'22" sobre Yates y de un segundo más sobre Alejandro Valverde. El del Cofidis se aprovechó del marcaje entre Mitchelton-Scott y Movistar para, a río revuelto, colocarse primero en la general.
La renta se presupone insuficiente, aunque Jesús sueña con que el rojo le dé una dosis de fuerza extra. Cada etapa que luzca el maillot será un regalo para uno de esos gregarios de quilates que ha encontrado en el Cofidis el lugar ideal en el que volar. La llegada de Mikel Landa propició que clase media del Movistar como los Herrada abandonaran el conjunto telefónico. Ahora, el bueno de Jesús Herrada ha puesto en jaque La Vuelta antes de comenzar la fase definitiva de la carrera.