El italiano Filippo Ganna (Ineos), con un tiempo de 10'42", se hizo con la crono final, en la última etapa de la 55 edición de la carrera Tirreno-Adriático, sobre un circuito de 10,1 km en San Benedetto del Tronto, en la que el británico Simon Yates (Mitchelton-Scott), pese a marcar el decimoctavo mejor crono, supo conservar la maglia azzura de líder y hacerse con la prueba.
Ganna, especialista en pista y persecución, y vigente campeón de Italia en contrarreloj, confirmó los pronósticos para hacerse con la etapa, además de ser el único corredor que bajo de los once minutos. Así, la segunda plaza fue para el belga Victor Campeanerts (NTT), a 18 segundos, y la tercera para el australiano Rohan Dennis (Ineos), a veintiséis segundos.
En la lucha por la general, Yates, que salía con un ventaja de 16 segundos sobre el polaco Rafal Majka (BoraH), supo mantener su diferencia, si bien solo con diecisiete segundos sobre su compatriota Geraint Thomas (Ineos), que partía tercero en la general y 'robó' la segunda plaza. El ciclista del equipo británico teminó siendo el cuarto en la crono con un tiempo de 11'10", por los 11'45" del nacido en Zegartowice.
Yates, ganador de la Vuelta a España 2018, suma su segunda carrera por etapas a su palmarés. Para el español Héctor Carretero (Movistar) fue la 'maglia' de ganador de la montaña, reconocida en la carrera con el color verde.
La Tirreno Adriático ha sido una carrera repleta de espectáculo en una semana difícil del calendario, ya que ha tenido que convivir a la sombra del Tour de Francia, algo que sin duda no ha sido fácil, pero además ha sido poco habitual, ya que es la primera vez que dos carreras de este caliebre coinciden en el calendario. Tirreno, prueba habitual de los líderes que preparan el Giro, ha sido una buena muestra para ver cómo van ciclistas de reconocido prestigio como Chirs Froome, Vincenzo Nibali o Jakob Fulgsang, todos ellos lejos de la victoria.
Una semana de espectáculo
Las mejores imágenes de la carrera las dejaron las etapas de montaña de Michel Woods (EF) y el vencedor de la general final, Simon Yates, que aprovechó su triunfo en la etapa reina para alzarse al primer puesto de la tabla y aguantar la primera posición a pesar de los embites de corredores como Geraint Thomas. El ciclista de Ineos será el líder del combinado inglés en el Giro de Italia y parece estar mucho más en forma de lo que se le había visto hasta el momento.
No ha sucedido así con su compañero Chris Froome. El ciclista ganador de cuatro Tour de Francia sigue dejando muchas dudas y, a pesar de que su objetivo esta temporada será finalmente La Vuelta a España después de haber sido descartado para la Grand Boucle, no parece ser capaz de encontrar su mejor golpe de pedal, y no se le ha visto en ninguna de las etapas peleando por la victoria. Quien sí se ha dejado ver y de forma brillante ha sido el neerlandés Mathieu Van der Poel, que se marchó con una espléndida victoria en la última etapa de media montaña.
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