Tim Wellens fue el corredor con más mecha entre los de la escapada y ganó al esprint a Michael Woods en la llegada a Ourense. Marc Soler no pudo con los rápidos rodadores con los que llegó y no pudo sumar su segunda victoria de etapa en esta Vuelta a España 2020. Los últimos 700 metros que picaban hacia arriba camino del Seminario de la ciudad gallega fueron determinantes para definir al ganador del día. [Así vivimos la 14ª etapa de La Vuelta a España 2020 entre Lugo y Ourense]
Después de varios ataques, a 11 kilómetros de meta Stybar, Wellens y Soler se fueron solos hacia adelante rompiendo de forma definitiva la escapada que permitió el pelotón. Una vez superaron el momento en el que se redujo de forma considerable la distancia que tenían, el gran grupo se rindió y permitió la victoria de los escapados. Pero Woods, Arensman y Van Baarle volvieron a darles caza para decidir el final entre los seis.
Entre los favoritos, la llegada tan estrecha provocó latigazos y, por consiguiente, cortes en el pelotón. Dan Martin se marchó en la curva final y picó un segundo con Primoz Roglic. Enric Mas llegó con los favoritos en el corte que se produjo ante la tensión de la llegada. No hubo diferencias entre los tres primeros que se juegan el triunfo final en Madrid.
Para mañana se espera la etapa más larga de La Vuelta 2020 que puede dejar a más de uno en la estacada. Por el tipo de recorrido y el kilometraje, la previsión es que el día sea favorable para las escapadas. Es un terreno sinuoso y será difícil que el pelotón pueda controlar las fugas. Además, a diferencia de lo que sucedió en 2016, esta vez la meta en Puebla de Sanabria estará en la última semana de carrera y no al principio, por lo que los equipos llegarán más justos de fuerzas. Veremos si algún equipo se atreve a armar batalla.
Fuga seria
El día tendría un gran aliciente de salida. Después de algunos intentos sin éxito para hacer la fuga, siete corredores se consolidarían para la escada del día con nombres de mucho nivel. Marc Soler (Movistar Team), Tim Wellens (Lotto Soudal), Dylan Van Baarle (Ineos Grenadiers), Thymen Arensman (Team Sunweb), Michael Woods (EF Pro Cycling), Pierre Luc Perichon (Cofidis) y Zdenek Stybar (Deceuninck Quick Step) se irían para adelante con un pelotón muy permisivo a pesar de la trampa de la llegada.
De hecho, la fuga siguió distanciándose hasta alcanzar una referencia de cinco minutos de distancia. Jumbo dejó hacer hasta que Astana cogió la referencia. El conjunto kazajo no consiguió entrar con Ion Izaguirre y, teniendo en cuenta que a Alex Aranburu le iba bien el final, se pusieron manos a la obra para acabar con la escapada. Al ver que no estaban consiguiendo reducir esa diferencia, cesaron en el intento y Direct Energie cogió la batuta.
El trabajo del equipo francés sí que tuvo resultado y redujo considerablemente la distancia entre el pelotón y la fuga acercando al gran grupo a falta de 25 kilómetros para la meta a un minuto y medio. Esta reducción hizo que Michael Woods arrancase para intentar irse solo en el grupo delantero. Eso incentivó a un Marc Soler que se fue con él y que hizo varias intentonas para reducir el número de ciclistas al frente del grupo de cabeza. Pero lo que consiguieron es que el pelotón se rindiera. La victoria estaba en la escapada.
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