La hazaña de Van Vleuten: de ganar las tres grandes en un año a soñar con el Mundial con el codo roto

Annemiek van Vleuten es una de esas corredoras que están marcadas por el sello de las leyendas. La corredora del equipo Movistar, a pesar de tener ya 39 años, serán 40 el próximo 8 de octubre, sigue siendo la mejor del mundo con amplia diferencia sobre el resto de sus rivales. Por ello, es la máxima favorita para todas las pruebas en las que participa. Y el Mundial no iba a ser para menos. 

La corredora neerlandesa es la gran estrella de la selección de su país. Gracias a sus éxitos se ha convertido en toda una institución. Las hazañas que consigue subida a su Canyon, marca que utiliza desde que compite en las filas de la formación telefónica, son la mejor propagación del renacer del ciclismo femenino en todo el mundo. Ella, con sus victorias y con sus ataques imposibles, ha hecho más que nadie por promocionar en todo el planeta un deporte que por momentos ha estado a punto de desaparecer para las mujeres. 

Hace unos días aterrizó en Wollongong con la tranquilidad de haber cerrado una temporada perfecta. Pero también con el hambre de quien no se cansa de ganar a pesar de rozar ya las cuatro décadas de vida. Su reto para finalizar su campaña dorada no era otro que alzarse con el maillot arcoíris que ahora mismo porta la corredora del Trek-Segafredo Elisa Balsamo. 

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Dentro de su extenso palmarés, Annemiek cuenta con una victoria en un Campeonato del Mundo. Fue en el año 2019, en Yorkshire (Reino Unido), cuando consiguió coronarse como la mejor del planeta en esta singular prueba. Además, un curso después, en Imola (Italia), consiguió colgarse su segunda medalla. Esta vez fue una plata tras terminar solo superada por su compatriota, y también leyenda, Anna van der Breggen. 

Annemiek van Vleuten en los JJOO de Tokio 2020 EFE

La hazaña más complicada

Gracias a todos los éxitos que ha conseguido en los últimos años, y que espera lograr también en 2023 antes de afrontar la idea de la retirada, Van Vleuten se ha ganado el derecho a ser considerada como una de las mejores ciclistas de la historia. Para muchos de sus fans, la mejor de todas sin discusión alguna. 

Ahora llegaba a Wollongong, Australia, como una de las mayores candidatas a ganar el título. Sería este su segundo entorchado. Sin embargo, ha tenido una importante desgracia con la que tendrá que lidiar si finalmente consigue tomar la salida en la prueba en ruta femenina. 

Van Vleuten participó este pasado miércoles en la carrera de relevos mixtos de contrarreloj de los Mundiales junto a sus compañeros de la selección de Países Bajos. Antes ya había corrido en la prueba contrarreloj individual, terminando en séptima posición. La victoria fue para su compañera Ellen van Dijk. Al comienzo de aquella carrera por relevos, Annemiek sufrió una extraña y dura caída. 

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Perdió el control de su bicicleta y se golpeó contra el suelo. Como ella misma decía al término de la prueba, no sabía por qué había perdido los mandos de su bicicleta. Ni siquiera había constancia de un fallo mecánico, ya que muchas hipótesis apuntaron a un pinchazo. Sin embargo, ella misma aclaró después que el reventón de su neumático delantero, que realmente se produjo, se ocasionó segundos después, cuando la bicicleta golpeó contra un bordillo fruto de la caída. 

Nada más caer, Van Vleuten quedó tendida en el suelo y con cara de susto mientras se sujetaba su codo. Había sufrido un fuerte golpe y podía tener una grave lesión. Fue trasladada a un hospital y allí se supo que tenía una pequeña fractura estable en el codo derecho. Sin embargo, había decidido no volver a casa. 

Esta decisión no respondía a otro fin que intentar correr la prueba en ruta de los Campeonatos del Mundo de Wollongong. A pesar de su considerable lesión, Van Vleuten quiere intentar este reto a medio camino entre la heroicidad y la locura. Desde un primer momento dejó claro que no necesitaba cirugía y que incluso los médicos le permitían montar en bicicleta. De hecho, este jueves ya ha salido a entrenar, a rodar un poco y a tomar sensaciones. 

De momento, su presencia en la carrera del sábado es duda y ella asegura que todo dependerá del dolor que sienta, pero que está acostumbrada y preparada para aguantar: "Puedo andar en bicicleta, pero depende del dolor y necesito ser sensata. Espero poder dormir". Mientras tanto, la Federación Neerlandesa mantiene el misterio en torno a su figura y matiza que está pendiente de evolución. No obstante, confirman que la decisión final será tomada de manera global "entre la corredora, los médicos de su selección y la seleccionadora en los próximos días".

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El gran reto dorado

Annemiek van Vleuten tiene entre ceja y ceja poder ganar el Mundial. Después de su lesión, ese reto se ha complicado a la enésima potencia. Sin embargo, quiere aprovechar que su lesión no es de extrema gravedad y que puede continuar montando en bicicleta para intentar conseguir una hazaña histórica: ganar las tres grandes en una misma temporada y el Mundial. 

La corredora de Movistar ha sido la dominadora absoluta de la temporada después de apuntarse el triunfo en el Giro Rosa, la carrera femenina más prestigiosa, el Tour de Francia, que por primera vez en décadas volvía a ser una carrera de más de una semana, y la adaptación de La Vuelta. La ronda española todavía sigue siendo una especie de piloto que no se puede comparar a las otras dos grandes, pero que no deja de ser la tercera del calendario debido a su crecimiento.

Aunque Van Vleuten todavía no lo considera así, espera que La Vuelta crezca en próximos años, lo cierto es que ha ganado el tríptico que tiene a su disposición. Y ahora esperaba poder cerrar este año mágico también con el Mundial. Sabe que tiene el riesgo de que necesita correr con cuidado y que eso, jugándose el maillot arcoíris, es imposible. Además, una caída podría dar al traste con lo que resta de temporada e incluso provocarle una retirada prematura. Pero Annemiek quiere correr el riesgo e intentar consagrarse con su última hazaña.