Lazkano roza la gesta en Bélgica y se sube al podio de la Kuurne-Bruselas-Kuurne que gana Van Aert

Oier Lazkano estuvo a punto de derribar una nueva barrera para el ciclismo español. El corredor de Movistar Team se quedó cerca de conseguir la victoria en la Kuurne-Bruselas-Kuurne, una prueba que jamás ha ganado un ciclista nacional, y finalizó en tercera posición.

La victoria fue a parar a manos de uno de los grandes favoritos, Wout van Aert, mientras que la segunda plaza fue para Tim Wellens, el corredor del UAE Team. Lazkano se jugó la victoria en esta prestigiosa carrera ante de dos auténticas estrellas del pelotón internacional y especialistas en este tipo de carreras, pero no pudo aguantar el sprint final.

La Kuurne-Bruselas-Kuurne es, junto a la Omloop, una de las dos carreras belgas que sirven para abrir el periodo de las clásicas de primavera de adoquines. Ambas conforman el prestigioso 'Opening Weekend', una fecha muy simbólica dentro del calendario internacional ciclista.

Pese a quedarse a las puertas de la victoria, la actuación de Oier Lazkano tiene mucho mérito. Se trata del primer español que consigue subirse al podio en esta prueba belga, un camino hasta ahora inexplorado para los corredores nacionales.

Protagonista con los mejores

Oier Lazkano ya había advertido hace unos días de que ha dado otro paso más en su carrera esta temporada. Con su maillot de flamante campeón de España, el de Movistar Team venció en la Clásica Jaén, donde tenía rivales precisamente como Van Aert, Wellens o Juan Ayuso, pero esto era otro nivel.

Lazkano se metió en el corte bueno del día muy pronto junto a Van Aert y a Tim Wellens, dos de los grandes favoritos. Los tres empezaron a hacer hueco y con el paso de los kilómetros quedó claro que la victoria iba a estar entre ellos tres. 

Grandes rodadores y especialistas en este tipo de pruebas, surcaron los tramos de pavé con facilidad. Se entendieron bien y todos pasaron a los relevos con generosidad, así que nadie pudo ya cogerles por detrás. Apenas hubo movimientos de ataque para intentar romper la armonía, unos quizás porque se tenían demasiado respeto, otros porque tendrían las fuerzas necesarias.

De eso, de fuerzas, llegó muy justo Lazkano al tramo final. Ilusionó a los seguidores españoles con sus opciones intactas hasta el final, pero no tenía nada que hacer. Más por orgullo que por piernas, fue el primero de los tres que trató de atacar antes del sprint, pero le cogieron bien la rueda y al nuevo cambio de ritmo ya no pudo responder.

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Van Aert se impuso con solvencia ante Tim Wellens. Una gran victoria para el belga, que ya estuvo entre los mejores el día anterior en la Omloop, y que le sirve para reivindicarse en este arranque de temporada.