Día de contrastes para Tadej Pogacar en la segunda etapa del Giro de Italia. El ciclista esloveno se llevó la victoria de etapa en el primer final en alto de la competición y además empezó a encarrilar el triunfo que todo el mundo espera, pero no fue una jornada totalmente plácida porque sufrió una caída que le metió el susto en el cuerpo y provocó además su enfado.
Camino de la ascensión final al Santuario di Oropa, la cruz de la jornada para Pogacar llegó cuando faltaban poco más de 11 kilómetros para llegar a la meta. Estaba siendo hasta el momento una jornada relativamente plácida para él, pero se encontró con un sobresalto que por suerte no tuvo demasiadas consecuencias.
El líder del UAE Team vio que la rueda delantera de su bicicleta estaba pinchada, así que tuvo que dejarse caer hasta el final del grupo para esperar la asistencia. Cuando el esloveno estaba a punto de recibir la ayuda del coche de su equipo, llegó el momento desgraciado.
En una curva de derechas, la rueda delantera perdió adherencia, la cubierta se salió y eso hizo que el manillar se le girara a Tadej Pogacar. El esloveno se fue al suelo, aunque por suerte no fue una caída que revistiera demasiada gravedad. La velocidad a la que marchaba el corredor era bastante baja, así que pudo evitar un golpe mucho más grave. Eso sí, nadie evitó el gran cabreo del corredor, y es que a nadie le gusta dar con sus huesos en el suelo.
Su primera exhibición
En este día de contrastes, Tadej Pogacar puso la cara apenas unos pocos kilómetros después. Por si había alguna pequeña duda de quién era el gran favorito para llevarse este Giro de Italia, el ciclista esloveno se encargó de despejarlas todas en la ascensión al Santuario di Oropa.
El del UAE Team pudo regresar al pelotón sin mayores problemas y, de hecho, en la ascensión final su equipo fue el que se puso al mando del gran grupo y el que empezó a marcar un ritmo fuerte. Aquello era síntoma de que tenían un as guardado bajo la manga.
Efectivamente, Tadej Pogacar no se aguantó las ganas y cambió en ritmo en plena ascensión en busca de conseguir las primeras rentas con respecto al resto de sus perseguidores. Cuando atacó ya nadie pudo seguirle. Ben O'Connor, otro de los llamados a pelear por el podio, pareció responder durante algunos metros, pero terminó desfalleciendo.
El resultado fue la victoria de etapa para Pogacar y unas rentas que empiezan a encarrilar la clasificación general. Daniel Felipe Martínez y Geraint Thomas trataron de aguantar el tirón y perdieron 27 segundos, Uijtdebroeks cedió 30 segundos al igual que Einer Rubio, y Juanpe López, el mejor español, se dejó 35 segundos.
Los grandes damnificados fueron Ben O'Connor, que se dejó ya 1 minuto con respecto a Tadej Pogacar, y Romain Bardet, que llegaba en buena forma pero que perdió 1 minuto y 20 segundos.