Los 5 cambios más llamativos en el reglamento de la UCI que debes conocer para 2025

Con la llegada del 2025, el nuevo año ciclista también comienza a ver la luz. Cada vez resta menos para que se termine el periodo de pretemporada y, mientras los ciclistas siguen con su particular puesta a punto en estas fechas navideñas, las primeras carreras del calendario ya están a la vuelta de la esquina.

Será este el año después de la que seguramente haya sido la mejor temporada de la historia a cargo de Tadej Pogacar. Va a ser una especie de todos contra el esloveno, que tendrá en su cuarto Tour de Francia su principal objetivo, pero siempre sin perder de vista otras tantas carreras a su alcance.

Sin embargo, a nivel legislativo también va a ser un año con muchas novedades. La UCI, en su afán de incrementar la seguridad de los ciclistas en carrera, ha modificado una serie de normas y no sin cierta polémica, como es habitual por otra parte. La mayor novedad llegará con la implantación definitiva de las cartulinas amarillas, pero a continuación destacados los cinco cambios más llamativos en el reglamento UCI para 2025.

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Las tarjetas amarillas

Es la medida más llamativa. El ciclismo se ‘futboliza’ con la implantación de este sistema de amonestaciones que va a traer mucha cola. Serán los comisarios de cada carrera los que anuncien, al final de la jornada y en el comunicado oficial, estas cartulinas amarillas.

Hay que destacar que no sólo los ciclistas serán susceptibles de ser amonestados, sino que cualquier persona que forme parte de la burbuja de carrera también se podrá llevar una tarjeta amarilla. Esto es, directores técnicos, mecánicos, auxiliares, motoristas, periodistas o cualquier otro profesional de la carrera.

En el caso de los ciclistas, serán los directores de cada equipo los que, posteriormente, tengan que confirmar la identidad de su corredor bajo una multa de 2.000 francos suizos en caso de que no cumplan con esta directriz.

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Las tarjetas amarillas serán acumulativas. Esto es, dos tarjetas amarillas en una misma carrera, ya sea de un solo día o por etapas, acarreará la expulsión definitiva. Esto es, que dos cartulinas amarillas en el Giro de Italia, Tour de Francia o Vuelta a España harán que un profesional tenga que abandonar la carrera. No sólo eso, también habrá una suspensión de siete días sin poder competir posteriormente.

Además, tres tarjetas amarillas en un mismo mes llevarán consigo una suspensión de 14 días sin poder competir, mientras que hasta seis tarjetas amarillas a lo largo de 365 días conllevarán una sanción de un mes fuera de la carretera.

Los maillots

La UCI también ha implantado cambios en la normativa para poder distinguir mejor a los ciclistas en carrera. En los últimos años muchos maillots se confundían, y la UCI quiere al menos que los líderes de cada prueba sobresalgan entre el resto en plena competición.

Así, en las grandes vueltas (Giro, Tour y Vuelta) los equipos deberán cambiar sus maillots habituales para evitar que sus colores coincidan con los de los maillots de los líderes de cada clasificación. El líder de la general, el líder de la montaña, el líder de los puntos o el mejor joven deberán distinguirse perfectamente.

Movistar Team

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Por otra parte, en el resto de carreras de una semana tendrá que ser al revés y serán las carreras las que deberán adecuarse para asegurarse que los maillots de líderes no se confundan con el resto de los equipos.

Los avituallamientos

En esta nueva normativa de la UCI también se legislan los avituallamientos. Ahora, esos lugares en los que se da a pie de carretera alimento y bebida a los corredores estarán perfectamente acotados y no se podrá dar absolutamente nada fuera de ellos.

Cada 30-40 kilómetros se establecerán avituallamientos, así que ahora no podrá haber auxiliares en las cunetas fuera de esas zonas. En los últimos años, los equipos más potentes y con más recursos jugaban con ventaja en este aspecto. Eso sí, el avituallamiento desde los coches seguirá produciéndose en cualquier momento.

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Prohibido celebrar victorias de compañeros

Una de las medidas más polémicas también llega en la nueva legislación de los sprints. En su afán por hacer las llegadas masivas más seguras, la UCI quiere que estos desenlaces rápidos dejen cada vez menos lugar a los momentos peligrosos

Así, se amplía el abanico de conductas que pueden ser sancionadas en estos desenlaces masivos y por ello los compañeros de los sprinters que se involucren en el lanzamiento no podrán hablar por la radio, bloquear a otros sprinters y tampoco soltar las manos del manillar. Es decir, que no podrán entrar en meta con los brazos arriba para celebrar la victoria de su compañero.

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La zona de seguridad

También se trata sobre la ampliación en determinados momentos y circunstancias de la ampliación de la zona de seguridad de 3 a 5 kilómetros, algo que ya pasó en el pasado Tour de Francia.

Eso sí, en los accidentes en los que tan sólo haya un único corredor implicado, este tiempo no se neutralizará. Es lo que sucedió con la caída de Primoz Roglic en el Tour de 2024. El corredor perderá tiempo si es él solo el único afectado aunque esté en los últimos 3 kilómetros de la zona de seguridad.