Cuando tenía 14 años, en la temporada 2005-06, Neymar Jr. hizo una prueba con el Real Madrid y estuvo a punto de fichar con el club blanco. Una década después, convertido en la máxima estrella de su selección y titular indiscutible en el Barcelona, sólo los problemas legales enturbian la felicidad del último representante genuino del fútbol brasileño. Su traspaso desde el Santos, firmado en 2013, es una seria jaqueca en la vida de numerosos 'notables' del fútbol: tanto el presidente del Barça, Josep Maria Bartomeu, como el ex presidente Sandro Rosell están formalmente acusados de fraude fiscal y tienen hasta comienzos de octubre para presentar alegaciones en su defensa.
La Justicia brasileña, por su parte, decidió la semana pasada embargar bienes del futbolista por valor de 42 millones de euros, como garantía de los impuestos (más una fuerte multa por presunta evasión fiscal) que le exige el fisco a raíz del citado fichaje. Dado que el importe supera el 30% de su patrimonio declarado (aproximadamente 55 millones de euros), fueron 'congelados' bienes de su padre y de tres empresas familiares: Neymar Sport e Marketing, N&N Consultoría y N&N Administraçao de Bens, Participaçoes e Investimentos.
Días después de esta medida cautelar, el ex agente del jugador, Wagner Ribeiro, ha publicado en Instagram una carta dirigida al padre de Neymar, el controvertido Neymar da Silva Santos, que comienza hablando de la alegría mostrada por numerosos seguidores tras el anuncio judicial. Ribeiro recrimina fundamentalmente a Neymar sénior haberle permitido volver a Brasil cuando se probó como juvenil con el Real Madrid y no haber adoptado la nacionalidad española. Además, en un inusual ejercicio de sinceridad, le recomienda que meta su dinero -legalmente- en paraísos fiscales y que el delantero acabe su carrera en el club 'merengue'.
Ribeiro da a entender que Neymar sufre persecuciones e insinúa que se deben a tres motivos: su preferencia por el Barcelona frente al Real Madrid; no haber querido contratar a periodistas que en 2009 se ofrecieron a asesorarle; y haber apoyado al candidato derrotado (Aecio Neves) en las últimas elecciones brasileñas. El ex agente (hoy empresario de otros futbolistas) sugiere también que el padre del capitán de la selección brasileña está siendo atacado por determinados medios y falsos amigos “aduladores” debido al origen humilde del progenitor de Neymar (en Brasil existe un creciente desprecio hacia los futbolistas 'nuevos ricos'). “Ellos quieren que usted siga 'favelado' [por su pasado en la favela]”, argumenta Ribeiro. En su opinión, la decisión familiar de mantener en Brasil el dinero obtenido y haberlo repartido “dentro de la ley” entre varios negocios fue un grave error.
“Si usted hubiese hecho las cosas de forma diferente, no hubiera peleado con empresarios y con los 'aduladores', se hubiese quedado en el Real Madrid y 'Juninho' [apodo familiar de Neymar] se hubiese nacionalizado español, a diferencia de lo que su conciencia mandaba, esas personas no estarían contra usted”, escribe Ribeiro.
Para la hacienda pública brasileña el jugador evadió impuestos porque declaró el dinero percibido en el traspaso como ganancias empresariales. Aunque la consultoría personal de Neymar ha vuelto a defender la inocencia del jugador (“mantenemos todos los derechos de imagen tributados en Brasil desde hace nueve años”) y los padres de Neymar han defendido repetidamente al jugador destacando que no es socio de las empresas de su padre, no hay paz para Neymar Jr., que a los 23 años es el quinto mayor goleador de la historia de la selección brasileña.
En un tono directo y sin tapujos, el agente remata su misiva con un consejo directo: “Toma tu 'pasta' y manda todo para paraísos fiscales, legalmente, claro. Para con esa manía de pagar impuestos en Brasil. Cierra tus empresas, el Instituto en Praia Grande y ve a disfrutar la vida con tu familia en las playas del Mediterráneo. Pero deja a Neymar jugar unos añitos más y que termine su carrera en Europa, preferentemente en el Real Madrid”.