Doce años después del fichaje del catalán por el equipo filial del Arsenal y su éxito en el primer equipo, hoy en día son numerosos los casos de futbolistas españoles que se aventuran en hacer las maletas y probar suerte en las canteras de los equipos punteros de Europa. Hector Bellerín, Manu García y Pedro Chirivella son algunos de los últimos futbolistas que decidieron seguir los pasos del internacional español.
“Eres un niño, te vienes solo, sin familia, dejando amigos en un gran club que también dejas atrás para apostar por otro tipo de vida, otro tipo de cultura y otro de fútbol”. Estas son algunas palabras de un joven futbolista que con tan solo 16 años decidió emigrar y apostar por crecer en un club foráneo. Cesc Fábregas supo que tenía escasas posibilidades por aquél entonces de jugar en el primer equipo del FC Barcelona.
Hoy en día es considerado un pionero, no por el hecho de jugar en la Premier League inglesa, sino por formarse como jugador empezando en el equipo de los reserves -filial en España para acabar triunfando en el primer equipo. Manu García (Manchester City), Pedro Chirivella (Liverpool FC) y Héctor Bellerín (Arsenal) son algunos de los casos más recientes que han optado por la exitosa fórmula de Cesc. Todos ellos tienen un denominador común: debutar en el primer equipo tras pasar por las distintas categorías inferiores.
Bellerin: extremo reconvertido a lateral
Héctor Bellerín (Barcelona, 1995) fichó por el Arsenal con 16 años en septiembre de 2011 tras su paso por la cantera del FC Barcelona. En su etapa en España jugó en la banda derecha como extremo pero su llegada a Inglaterra le hizo reconvertirse en lateral. Estuvo dos temporadas en el filial del Arsenal hasta que en junio de 2013 firmó su primer contrato como profesional con el club inglés y fue cedido al Watford durante media temporada.
Arsène Wenger le hizo debutar con el Arsenal en un partido de Champions League frente al Borussia de Dortmund. Las lesiones de Debuchy y Chambers permitieron al español tener la oportunidad de demostrar su calidad. Lo consiguió. Desde entonces, Bellerín se ha hecho dueño y señor de la banda derecha del conjunto londinense gracias a su descaro, su personalidad, alejado del prototipo de lateral encorsetado.
Es un jugador que pide el balón, se ofrece a sus compañeros para combinar y no duda en incorporarse al ataque tantas veces como pueda en un partido. Además, cuenta con una precisión casi milimétrica en los centros, algo de lo que carecen muchos de los laterales hoy en día. Su adaptación al fútbol inglés y a Londres es total hasta tal punto que el lateral dejó claro que llegó al Arsenal para quedarse y no para pensar en volver pronto a España.
De Gijón a Manchester
El Manchester City cuenta en su filial con otra joven promesa española. Manuel García (Oviedo, 1998) es un centrocampista ofensivo que llegó al Manchester City sub-18 procedente del Sporting de Gijón a la edad de 16. Su buen rendimiento le permitió ascender al equipo sub-21 el año pasado y este año ya ha debutado a las órdenes de Manuel Pellegrini, jugando dos partidos, anotando un gol en la Capital One y siendo partícipe de la pretemporada del conjunto inglés.
No dudó en hacer las maletas para irse a Manchester. “Quería aprender otro idioma, otra cultura y probar suerte en Inglaterra”, ha dicho el asturiano. A punto de cumplir la mayoría de edad, Manu García es un centrocampista con llegada y fuerte disparo desde fuera del área que muchas veces se materializa en gol. Es un mediocentro versátil, adaptándose a la posición de media punta y en ocasiones dirigiendo el juego del equipo, combinando en espacios reducidos o implementando la pausa necesaria a cada momento del partido. Sabedor de la competencia que hay en el equipo Citizen, García no desespera en su objetivo de asentarse en el primer equipo y se apoya en Jesús Navas, del cual recibe consejos y comparte charlas.
Chirivella: un mediocentro en Merseyside
Pedro Chirivella (Valencia, 1997) es el último español en debutar en un club inglés tras su paso por las categorías inferiores del Liverpool. El valenciano llegó al club de Merseyside con 16 años tras abandonar el Valencia, club donde creció y se formó hasta entonces. “En un par de meses tomé la decisión de fichar por el Liverpool, fue un decisión que no tuve que pensar demasiado. Al principio, cuando me dijeron que el Liverpool estaba interesado en mí, pensé en venirme yo solo, pero luego lo pensé mejor y creí que lo mejor era que me acompañara mi familia”, señaló el mediocentro. Chirivella comenzó jugando en el equipo sub-18 y a los pocos meses ascendió al sub-21 tras demostrar su calidad.
Al igual que Manu García, el pasado verano completó la pretemporada a las órdenes de Brendan Rodgers en el primer equipo y en la presente temporada ha sido convocado en numerosas ocasiones. Además, el español está bajo la batuta del carismático Jürgen Klopp en todos los entrenamientos que realiza el primer equipo durante la semana.
No fueron pocos los clubes españoles que pusieron sus miradas en el valenciano, pero Chirivella escogió el Liverpool, ya que “la cantera en Inglaterra se trata de otra manera y hay muchas opciones de llegar al primer equipo”. Y así fue. Su debut con el Liverpool fue en Europa League frente al Girondins de Bordeaux. “Fue inolvidable, no me lo esperaba para nada y tuve la ‘suerte’ de que Kolo se lesionó y pude disfrutar de muchos minutos”, recuerda ilusionado Pedro.
Estos son solamente tres nombres de tres adolescentes que se embarcaron en una arriesgada apuesta, dejando atrás a sus familias, sus amigos y sus ciudades. Hoy, ya adultos, han cumplido el sueño que anhelaban. Jugar con el primer equipo. La fórmula de Cesc, de momento, les ha funcionado.