Lo mejor de este Madrid es que después de una temporada difícil, en la que que ha tenido muchos problemas, puede arreglar la temporada y tiene que dejar atrás todo lo ocurrido anteriormente. Y además no creo que este partido sea parecido a la final. En Milán se va a encontrar el Madrid un encuentro difícil y complicado de ganar. Ante el City los jugadores se dejaron el alma. Quizás si hablamos de juego es otra cosa, pero ya están en la final y tiene que olvidarse de todo lo anterior. Un partido puede decidir una temporada.


Por otra parte, no creo que el Madrid vaya a llegar a un ritmo inferior. En una final de la Champions no cuenta lo que se haya hecho anteriormente. Poco importa si has jugado bien o mal, eso no se va a reflejar en el partido. Y en la final, obviamente, el Real Madrid querrá llevar la iniciativa y el Atlético querrá salir a la contra.

Bale consuela a Hart tras el partido.

Bale consuela a Hart tras el partido. Sergio Pérez Reuters

Hablando ya del partido, no tuvo el Madrid muchas ocasiones de gol en la primera parte, pero fue dominador en muchos aspectos: el ofensivo, el defensivo, en lo físico... Pero no tuvo mucha precisión y no pudo aumentar la renta en el marcador. Durante los primeros 15 minutos ambos equipos abusaron de los pases largos, sin perder la posición... Pero a partir de ahí el Madrid se hizo dueño del partido, más con sensaciones que con una realidad de crear ocasiones. Y en los últimos minutos se dejó dominar para no recibir un gol. Y entonces llegó la ocasión del City…


En esa primera mitad, el problema del Manchester llegó aun más con la lesión de Kompany. El City salió al campo con tres jugadores muy pesados en la medular: Fernandinho, Fernando y Touré. Y le costó que los balones llegaran arriba. Y, por tanto, los jugadores que podrían haber puesto en peligro al Madrid no lo hicieron porque no les llegaron balones.


Ya en la segunda mitad, el City parecía querer continuar como los últimos minutos del primer tiempo, pero ahí se acabó todo. El Madrid, con su propia responsabilidad y los nervios de no haber podido sentenciar el partido, le fueron haciendo crecer al City. Y en ese momento vimos la poca aportación de sus figuras, como Agüero y De Bruyne. Y así acabó todo. El Madrid, muy superior, estará en Milán. 

* Mariano García Remón defendió la portería del Real Madrid durante 14 años. Entrenó al equipo blanco en 2004 y pasó por los banquillos del Sporting de Gijón, la U. D Las Palmas o el Numancia, entre otros.