Basilea se ha convertido en la quinta ciudad donde el Sevilla consigue levantar la Europa League (antigua Copa de la UEFA) a lo largo de su historia. Eindhoven, Glasgow, Turín y Varsovia fueron las anteriores urbes donde el conjunto de Nervión reinó en el Viejo Continente. Así fue el recorrido triunfal del equipo más laureado de la historia de la segunda competición europea de clubes.
2006: Sevilla-Middlesbrough (4-0)
Fue el partido por el título más asequible para el conjunto andaluz. En el comienzo de su época dorada, con Juande Ramos a los mandos técnicos, el 'Boro' no fue rival para los hispalenses en tierras holandesas. Luis Fabiano, Maresca (por partida doble) y Kanouté marcaron los goles, aunque la auténtica final se disputó en semifinales ante el Schalke 04.
Entonces, Antonio Puerta se convirtió en mito del sevillismo con un gol en la prórroga de la vuelta, fundamental para pelear por la entonces Copa de la UEFA. El malogrado canterano era una de las estrellas de aquel equipo, junto a la recordada dupla atacante Kanouté-Luis Fabiano, Dani Alves, Adriano o Jesús Navas.
Empezaba una de las épocas doradas (sino la que más) de la historia del Sevilla. El club acababa de inaugurar un reinado europeo que, aunque sus integrantes todavía lo desconocían, le pondría a la altura de los grandes equipos continentales.
2007: Espanyol-Sevilla (2-2, 1-3 penaltis)
El Sevilla llegaba a su segunda final europea consecutiva. Esta vez, para protagonizar un encuentro copado por el fútbol nacional, ya que el Espanyol fue el rival en aquella ocasión. ¡Y vaya rival! El empate a dos tras la disputa del tiempo reglamentario y de la prórroga (goles de Riera y Jonatas para los azulones y de Adriano y Kanouté para los hispalenses) obligó a fiarlo todo a los penaltis.
Fue el gran momento, otro más aquella temporada, de Andrés Palop. Por si no había tenido suficiente con su histórico gol de cabeza para forzar la prórroga ante el Shakhtar Donetsk (octavos de final), dio a su equipo la segunda UEFA consecutiva. ¿Cómo? Deteniendo tres de las cuatro penas máximas del Espanyol y convirtiéndose en el gran héroe del Sevilla en Glasgow. Para culminar el festín de títulos, días después llegó un doblete histórico al conquistar la Copa del Rey ante el Getafe.
2014: Sevilla-Benfica (0-0, 4-2 penaltis)
Siete años después de su última final continental, Nervión volvió a festejar un título europeo. Y no sin sufrimiento. Primero, con otro gol postrero, el de M'Bia en semifinales. Después, con otra tanda de penaltis exitosa, en la que Beto tomó el testigo de Palop. Las paradas del guardameta portugués resultaron fundamentales para que el Sevilla fuese el primer campeón de la nueva Europa League en Turín.
Aunque la auténtica estrella de aquel Sevilla fue Ivan Rakitic. La temporada del mediocentro croata fue tan excepcional que el Barça acabó haciéndose con sus servicios al término de la misma. Antonio Puerta y Dani Jarque tuvieron su momento de gloria gracias al recuerdo de los futbolistas hispalenses en la celebración del título.
2015: Dnipro-Sevilla (2-3)
En una suerte de guiño a la historia, el Sevilla repitió final europea el año pasado, como ya hiciese para conseguir sus dos primeros títulos europeos. De nuevo, hubo sufrimiento, pero también un héroe evidente: Carlos Bacca. Los dos goles del delantero colombiano, unidos al tanto de Krychowiak, sirvieron para derrotar a un Dnipro que plantó cara, y mucha, en Varsovia. Los tantos de Kalinic y Rotan pusieron suspense a la final, pero los andaluces acabaron imponiéndose.
La victoria hispalense supuso que España se convirtiese en el país con más títulos en la segunda competición europea de clubes junto a Italia. Además, supuso mantener intacta la imbatibilidad del club sevillano en las finales de la Copa de la UEFA/Europa League.
2016: Liverpool 1-3 Sevilla
Una vez más, el Sevilla se mostró infalible con una final de Europa League de por medio. La competición no conoce otro campeón que no sea el equipo hispalense desde su nueva denominación. Esta vez, tocó sobreponerse a una primera mitad arrolladora del Liverpool para acabar remontando y ganando. El gol de Sturridge fue contrarrestado nada más arrancar la segunda parte por Gameiro y por el ímpetu de Coke, que marcó por partida doble. Ya saben, a la tercera (final consecutiva) va la vencida.
Así es el fútbol, donde todo puede cambiar en tan sólo unos minutos. A la vez, es el mismo deporte donde algunas cosas son inmutables y permanecen en el tiempo. Como este Sevilla, que ya es historia viva del fútbol europeo a golpe de sus cinco títulos.