Cuando Kevin Rodrigues anotó el gol del empate a uno contra el Real Madrid en el estadio de Anoeta este domingo, un camarógrafo se fracturó una pierna por la caída de una valla publicitaria junto a una grada supletoria colocada detrás de la portería del fondo norte. El suceso forzó una interrupción del encuentro para que el periodista fuese atendido por la Cruz Roja y posteriormente evacuado en camilla con una pierna inmovilizada.
Las obras en curso en el estadio donostiarra hicieron que el club colocase una grada supletoria en una portería. La avalancha generada por el gol probablemente desplazó las vallas publicitarias, que golpearon al cámara de televisión mientras trabajaba.
Durante su evacuación, que generó una cierta alarma, el herido mostró ostensiblemente el pulgar arriba para tranquilizar al público. El partido se reanudó tras cinco minutos de parón.