Ya había acabado su discurso durante la asamblea de compromisarios que se está celebrando este sábado y no estaba previsto que volviera a hablar, pero Josep María Bartomeu, presidente del Barcelona, pidió la palabra. Fue minutos después de que Mariano Rajoy activara el 155 y anunciará el cese del presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, y todo su Govern.
Bartomeu quiso dar su apoyo a todas las instituciones "afectadas por el artículo 155" y pidió una respuesta cívica y pacífica, insistiendo en la idea del diálogo, dentro de la pertenencia del Barça a la Comisión independiente para el diálogo, la mediación y la conciliación. Además, el presidente pidió a los aficionados que vayan al Camp Nou que se exprese de forma pacífica en el partido de este sábado ante el Málaga (20:45 horas).
Con una sala ya más vacía, las palabras de Bartomeu fueron recibida por gritos de "¡votaremos!" y "libertad" acompañados por muchos aplausos. "El Barcelona siempre ha estado lado del pueblo de Cataluña", comentó el máximo mandatario del club azulgrana.
Estas palabras de Bartomeu han sido ya en el final de la Asamblea de Compromisarios que se está celebrando este sábado, previo al partido del Málaga, y en el que presidente también apoyó a Jordi Sánchez y Jordi Cruixart, líderes de la ANC y Òmnium Cultural, actualmente en prisión acusados de delitos de sedición. El mandatario barcelonista señaló que es "inadmisible" que en un estado de derecho "haya personas encarceladas por sus ideas políticas".
Bartomeu subrayó que el Barça quiere estar en la Liga y que su participación "está asegurada", ya que la "viabilidad del club" pasa por mantener el vínculo con el torneo del que es fundador desde 1929.