España está concentrada desde este martes en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas para los encuentros amistosos ante Costa Rica y Rusia. Dos partidos intrascendentes que han servido para presentar al mundo la camiseta con la que el conjunto de Julen Lopetegui jugará sus encuentros en el Mundial de Rusia 2018. De hecho, lo primero que ha hecho el equipo nacional incluso antes de entrenarse por primera vez, ha sido posar con la prenda de la discordia para la imagen oficial del próximo Mundial.
El cromatismo del diseño hecho por la marca alemana Adidas ha provocado una polémica nunca vista en torno a la selección española. Especialmente, porque España ya vistió esos mismos colores 'republicanos' en algún momento de la historia más reciente de nuestro fútbol. Sin embargo, el clima político y la situación en Cataluña han ayudado ha levantar una polvareda en torno a la camiseta, pues un azul que es azul, según la refracción de la luz se convierte en morado y hace que los rombos verticales de la mismas parezcan confeccionar una bandera republicana.
Tal ha sido la polémica y de tal envergadura las reacciones entre los aficionados, que Juan Luis Larrea, el presidente de la Federación Española de Fútbol, ha reconocido que desde la RFEF se están planteando volver a un diseño anterior para devolver las aguas a su cauce. Es más, el martes por la noche, desde el ente federativo anunciaron la cancelación del acto oficial de presentación de la camiseta para intentar tranquilizar la situación antes de tomar alguna decisión al respecto.
Los ribetes morados, mayoritariamente, no gustan y las redes sociales se convirtieron en un hervidero de críticas, burlas y memes. Sin embargo, la zamarra también tiene quien la defienda y la voz más autorizada ha sido la de Pablo Iglesias, líder de Unidos Podemos, quien opinó que “hacia tiempo que la selección española no vestía una camiseta tan bonita. Todos con la Roja”.
Por el momento, la camiseta, sin presentación oficial a los medios, continúa como prenda oficial de la selección española para el Mundial de 2018. Sustituirla es una opción, aunque bastante complicada, ya que Adidas ha comenzado su fabricación para la venta y cualquier cambio obligaría a volver a un modelo anterior y no pensar en nuevos diseños. La camiseta de selección nacional se enmarca dentro de una opción de Adidas, que ha decidido recuperar y modernizar los diseños de las camisetas que las selecciones nacionales utilizaron en el Mundial de Estados Unidos 1994, de ahí el parecido de este diseño con la camiseta de infausto recuerdo que Luis Enrique manchó de sangre tras aquel codazo de Tassotti.
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