La polémica sigue rodeando al fútbol brasileño. Si la violencia está casi a la orden del día, ahora le ha tocado pasar un mal trago a un futbolista de la primera división del país sudamericano. Se trata de Vitinho, un futbolista que conoce bien la liga española después de jugar la temporada pasada en calidad de cedido en el Barcelona.

Actualmente milita en el Palmeiras, uno de los equipos más reputados de Brasil y actual semifinalista de la Copa Libertadores, y precisamente después de un entrenamiento con su club fue asaltado por tres secuestradores. Vitinho abandona el centro de entrenamiento en su coche junto a su novia cuando estos individuos les sorprendieron.

Durante dos horas les mantuvieron retenidos los asaltantes. Un secuestro exprés en el que les sacaron sus tarjetas para realizar pagos. Los llevaron a un cautiverio de la zona este de la favela Água Blanca. Tras conseguir el dinero que querían, los soltaron pero se quedaron con el coche del jugador brasileño.

Vitinho, en su presentación con el Barcelona. Foto: fcbarcelona.com

A la madrugada siguiente, los sospechosos fueron detenidos por las autoridades brasileñas. Los cogieron después de una persecución que duró poco más de un kilómetro. Vitinho iría hasta la delegación de la policía para proceder al reconocimiento de los detenidos. Estos se encuentran en prisión preventiva a espera de tener la audiencia ante el juez.

Los 'raptos relámpagos' en el fútbol brasileño

No es la primera vez ni será la última que un jugador brasileño se encuentra en una situación así o con alguno de sus familiares. En España se recuerdan casos como la retención de la madre del exjugador del Real Madrid Robinho entre el 6 de noviembre y el 17 de diciembre de 2004, cuando todavía era jugador del Santos, o la de Luis Fabiano, mítico delantero del Sevilla. Entre estos 'raptos relámpagos' también destaca en el que se vio envuelto el padre de Romario en 1994 por el que los secuestradores pidieron siete millones de dólares. 

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