El francés Kingsley Coman, considerado uno de los jóvenes más prometedores del mundo, solo ha podido disputar tres partidos con el Bayern Múnich en la Bundesliga en la presente temporada. El extremo del equipo alemán participó en los dos últimos partidos tras más de tres meses de baja por lesión en los ligamentos del tobillo.

"Espero no tener que revivir lo que he pasado, ya es suficiente. No aceptaré una tercera operación, significará que tal vez mi pie no está hecho para este nivel", afirmó Coman a TF1. Y en el caso de que eso suceda, el jugador señaló que llevara una "vida anónima". 

También sufrió lesiones durante la temporada 2016/2017 que le hicieron estar alejado casi tres meses del terreno de juego. En la campaña pasada únicamente pudo disputar 21 partidos, mientras que en la anterior fueron 19 los encuentros en los que participó. Un balance pobre para un futbolista que apuntaba muy alto.

Perder al joven extremo significaría un duro golpe para el Bayern Múnich, ya que el equipo alemán está a punto de perder al holandés Arjen Robben a final de temporada tras la finalización de su contrato, mientras que el francés Frank Ribéry tiene 35 años y también dirá adiós al final de la 2018/2019. El cambio de ciclo en el conjunto bávaro está en marcha, pero la situación de Coman preocupa precisamente por el adiós de las dos leyendas.

Partido de altura en Europa

Coman y el Bayern de Múnich se enfrentarán al Ajax de Amsterdam en su choque de la Champions League, correspondiente a la sexta y última jornada de la fase de grupos. El Ajax necesita ganar para asegurarse el primer puesto del grupo, mientras que el Bayern se clasificará primero con un empate o una victoria.

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