Minuto 64 de partido entre el Real Madrid y la Real Sociedad. Vinicius recibe un balón largo y con la pierna derecha conduce hasta internarse en el área y llegar a la altura de Gerónimo Rulli que, con el brazo, zancadillea a Vinicius. Munuera Montero no decreta penalti; el colegiado del VAR, tampoco avisa de la infracción y la ira de los madridistas se enciende contra el árbitro andaluz.
La afición blanca clama en busca de respuestas sobre por qué el colegiado al frente del videoarbitraje no intervino en una acción, al menos, dudosa. El protocolo que estaba llamado a ser la solución a décadas de errores arbitrales, aún tiene fallos, algo que no se explican en el Santiago Bernabéu. Todavía se preguntan cómo, ante un derribo claro -aunque el portero argentino toca el balón-, el colegiado en primera instancia no señala penalti, pero todavía más inexplicable es por qué Melero López, el colegiado al frente del VAR durante el partido, no avisó al árbitro principal para que revisara la jugada en la pantalla.
Esta jornada se ha estrenado el VAR en la Copa del Rey y lo ha hecho en el momento más polémico desde su llegada a España. El Leganés visita el Santiago Bernabéu en busca de repetir la gesta de la pasada campaña, mientras que desde el equipo blanco tendrán un ojo pendiente del fútbol y otro en el funcionamiento de un sistema que presentaron como la solución a las polémicas arbitrales.
El fallo en el Real Madrid - Real Sociedad está reconocido incluso por Antonio Jesús López Nieto, representante de LaLiga en el Comité Técnico de Árbitros de la RFEF. El exárbitro admitió este lunes en COPE que "después de verlo repetido en la televisión mi opinión es que es penalti, no pasa nada". Y explicaba que "se debería haber intervenido desde el VAR".
"El VAR está para que un partido no se decida por un error del árbitro". Estas fueron las palabras de Velasco Carballo, el pasado mes de agosto, el día de la presentación oficial del sistema ante los medios, y calificó su implantación en La Liga como "un éxito". Con 18 jornadas de liga disputadas, todavía hay dudas sobre qué uso se le está dando a esta tecnología, en qué jugadas interviene y en cuáles la decisión queda a discreción del árbitro principal.
¿Cuándo interviene el VAR?
La presencia del árbitro asistente de vídeo en un partido está para corregir errores graves del árbitro que sean claros y no haya opción a la duda, aunque la decisión final siempre será tomada por el colegiado principal.
La sala de VAR, que en el caso de las competiciones españolas se ubica en una misma sede en Madrid para todos los encuentros, solo tiene potestad para intervenir en cuatro casos muy concretos: situaciones que acaban en gol y en las que no se sabe si el balón ha salido previamente, si hay fuera de juego o no, o si existe una falta previa de un atacante; en jugadas en las que claramente hay una infracción de tarjeta roja o que se ha mostrado una incorrectamente; cuando el árbitro se equivoque identificando a un jugador al que amonesta o expulsa; y en aquellas jugadas en las que el árbitro señala un penalti que no es, o no pita uno que sí debe ser señalado.
Cabe destacar que las jugadas no se rearbitran, simplemente se chequean posibles errores, y que la asistencia del VAR no lo pide el árbitro, sino que es desde la sala de videoarbitraje donde se requiere la atención del colegiado para que una acción sea revisada.
De esta manera, hay dos procedimientos a seguir: el primero de ellos es avisar mediante el pinganillo de aquellas jugadas que no requieran una segunda visualización por parte del colegiado, como es el caso de los fueras de juego. El segundo, consiste en ver repetido en un monitor ese lance del juego y valorar, con otro punto de vista, si la primera decisión ha sido acertada o no, algo que no sucedió en el Real Madrid – Real Sociedad.
¿Debieron avisar a Munuera Montero?
El resto de jugadas quedan bajo el criterio del árbitro que se encuentra en el terreno de juego y a su interpretación de las mismas. Es el caso de la acción de Vinicius el pasado domingo. A ojos de Munuera Montero, la acción no era merecedora de sancionarla con penalti. Tampoco consideró que se tratase de un piscinazo, pues no amonestó al brasileño; simplemente un lance del juego del que el cordobés estuvo seguro de haber visto bien desde el primer momento.
Todas las miradas apuntan a Melero López, que es el que tendría que haber avisado al árbitro principal de que no señalar penalti era un error manifiesto, y en ese caso acudir a revisarlo al monitor para consultarlo, aunque tras la revisión Munuera Montero podría haber mantenido su decisión. Su inacción en la jugada de Vinicius le coloca como el principal responsable de un error que se tuvo que solventar en el campo, para evitar las suspicacias en torno a una labor, la de árbitro, que con VAR y sin él sigue generando polémicas.
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