Miku, sobre Venezuela: "Los hijos de militares chavistas van con Ferrari"

La situación de Venezuela en los últimos días están siendo insostenibles. El jugador venezolano Nicolas Fedor 'Miku' se dio a conocer en España durante su paso por el Rayo Vallecano, el Getafe o el Valencia, entre otros. El futbolista se sinceró en Radio MARCA sobre la situación vivida por sus compatriotas últimamente.

Miku dejaba claro la legalidad de los acontecimientos y su oposición al régimen chavista: "No hubo un golpe de estado ni se autoproclamó como se dice en España. El presidente está haciendo uso de una ley que está redactada, es legal. Todos los que estamos esperando para la mejora de nuestro país esperamos que tengamos apoyo internacional. Creo que el gobierno español se acabará pronunciando. El régimen anterior ha hecho cosas buenas, no voy a mentir, pero se les fue de las manos y se han enriquecido. Vivo en Madrid y los hijos de militaristas chavistas van aquí con Ferrari y van a restaurantes con el dinero del pueblo, el que no va a Venezuela no sabe lo que ocurre. Yo que voy a menudo puedo decir que la situación es dramática".

El miedo de los venezolanos

El futbolista asegura el terror vivido por los ciudadanos durante estos momentos tan difíciles para el país:"Tristemente me parece que va a ser el desenlace. Las protestas están siendo muy grandes, me dicen allí que 'si no corremos, nos disparan con balas de verdad y a matar'. Ellos saben que pueden ir a la cárcel, hay un grave error en Venezuela y es que la guardia nacional está militarizada. Durante 20 años ha sido así".

Miku en la presentación con su nuevo club. Foto: Twitter (@bengalurufc)

Miku ha explicado el problema con el dinero que hay en Venezuela: "Como deportista es imposible juzgarlo porque lo consiguió todo y fue un ídolo. Lo que pasa en Venezuela es que hay mucho dinero y, cuando la gente tiene poca moral, te compran muy rápido. No lo sé, pero al final opinar desde fuera no es fácil. Le invitaría a vivir en un barro venezolano y opine. Es fácil hacerlo desde Dubái o México sin estar ahí. Todo esto es una tapadera. Aquí un día el pollo vale 2.000 y al día siguiente 5.000".

Una situación difícil para su familia

Para finalizar sus declaraciones manifestó los difíciles momentos que vive con sus hijas cuando visita su país natal: "Ahora que tengo niñas sí que cambia todo, la percepción. Tomo muchas precauciones cuando voy. Nosotros nos manejamos porque crecimos allí y sabemos por dónde moverse. Mis niñas son las tres madrileñas y están acostumbradas a otra cosa. Les cuesta cuando les digo 'no bajes la ventana, no te asomes, vámonos rápido o no hables con nadie en el centro comercial'".

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