Fin a una de las pesadillas del Rayo: el estadio supera la Inspección Técnica

El estadio del Rayo Vallecano ha superado la Inspección Técnica de Edificios (ITE) una vez finalizadas las obras de reforma y adecuación llevadas a cabo por la Comunidad de Madrid con una inversión de 1,2 millones de euros.

El Gobierno regional ha reservado un millón de euros más para seguir invirtiendo durante este año en mejoras en el estadio del club de fútbol que compite en Primera División.

El Consejo de Gobierno regional ha sido informado en su reunión celebrada este martes de la finalización de los trabajos, que se dieron por concluidos el pasado mes de noviembre, una vez presentada la documentación correspondiente ante el Ayuntamiento de Madrid.

La Comunidad fue la encargada de las obras

El campo de fútbol, propiedad de la Comunidad de Madrid, está cedido al club a través de un convenio firmado en el año 1985 por el entonces presidente regional, Joaquín Leguina, que permite que el Rayo Vallecano -actualmente en Primera División- juegue, entrene y desarrolle su vida deportiva en estas instalaciones.

Con el objetivo de pasar la ITE y optimizar las condiciones del estadio donde juega el Rayo Vallecano, el Ejecutivo regional acometió labores de mejora en la accesibilidad del recinto y la seguridad de evacuación, así como en la grada y cubiertas, eliminando elementos deteriorados, entre otros trabajos. Además, se ha llevado a cabo un análisis estructural adicional, con el fin de confirmar la seguridad de la estructura general del edificio y de los graderíos.

De esta forma, el Ejecutivo madrileño cumple con su objetivo de garantizar la seguridad de los aficionados del Rayo Vallecano y, además, renovar una instalación deportiva tan importante para los vecinos de Vallecas y los aficionados del club, ha señalado en la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Gobierno el vicepresidente regional, Pedro Rollán.

En este proyecto de obras, el Ejecutivo regional priorizó la seguridad y la mejora de la accesibilidad en el estadio, tanto en el acceso al recinto como dentro del mismo a los graderíos principales.

Además, la obra planteó actuaciones de mejora para paliar los problemas de humedades detectados en distintos puntos del estadio, sobre todo en los graderíos bajos.

Por fin se acaban los problemas para el Rayo

Igualmente, se actuó sobre la estructura, eliminando la oxidación de elementos metálicos en cubiertas y vallados, retirando elementos de publicidad obsoletos y reparando las fachadas exteriores y los pasillos interiores. Asimismo, con el objetivo de mejorar la accesibilidad general del inmueble, se construyó una rampa de acceso a la tribuna preferente desde la calle Sierra del Valle.

También se procedió a sustituir las barreras arquitectónicas que separaban el campo de las gradas y se instalaron puertas de evacuación hacia el campo en todas las escaleras del graderío. Por último, se renovaron los peldaños de las gradas, se ampliaron en número y dimensión las escaleras de las tribunas, y se llevó a cabo la renovación de asientos.

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