Manchester United y Barcelona se veían las caras en la ida de los cuartos de final de la Champions League. Tras eliminar al PSG y al Lyon respectivamente, la suerte había hecho que ambos equipos se enfrentasen en la siguiente ronda. [Narración y estadísticas: Manchester United 0-1 Barcelona]
Los de Valverde visitaban Old Trafford, donde nunca habían ganado, y con la maldición de los cuartos de final -el equipo catalán no se clasifica para unas semifinales de Champions desde hace cuatro años-. Con todo ello, el entrenador extremo puso lo mejor que tuvo ganándole Semedo la partida a Sergi Roberto y jugando con Messi, Coutinho y Suárez arriba.
El choque empezó con un Barcelona que quería dominar y tener la posesión de la pelota. Y eso ocurrió. Posesiones largas de los de Valverde ante un United con una presión muy alta.
El VAR entró en escena
El Barcelona controlaba, pero no creaba peligro. Los de Valverde no encontraba su juego, pero una llegada al área de De Gea se convirtió en gol, aunque fue anulado. El VAR revisó la jugada y finalmente concedió el gol.
Centro al segundo palo de Messi tras un pase picado de Busquets que cabeza Luis Suárez al fondo de las mallas. Tocó ligeramente Shaw, por lo que el gol se lo dieron al jugador del United.
Paso adelante del United
El equipo de Solskjaer empezó a tener más la pelota y a llegar al área de Ter Stegen. El Barcelona sufría y fue Rashford quien probó suerte, pero su disparo se marchó desviado. El partido había entrado en una fase loca algo que no ayudaba al equipo catalán.
Segundos antes de una de las jugadas polémicas del partido, Messi cayó sobre el terreno de juego y empezó a sangrar tras el choque brutal que sufrió ante Smalling. Acto seguido Old Trafford pidió penalti tras una caída de McTominay dentro del área en la que estaba involucrado Piqué. El árbitro no señaló nada y siguió el juego.
El choque había cambiado totalmente desde el gol del Barcelona. Los de Valverde no tenían el control del choque y el United empezó a aumentar el ritmo del partido. A pesar de ello, el peligro en el Barcelona seguía presente y en una jugada donde volvió aparecer Suárez pudo llegar el segundo gol del partido.
Le llegó un balón al uruguayo, el esférico acabó en Coutinho y con un derechazo hizo que De Gea se luciese sacando el pie. Antes de llegar al descanso el United pudo poner el empate, pero el cabezazo de Dalot, con todo a su favor, se marchó desviado.
Mismo guión en la segunda parte
No cambió nada el partido en los primeros minutos del partido. No le duraba nada la pelota al Barcelona y en todo momento los hombres de Valverde estaban imprecisos. El United tenía la pelota, pero Ter Stegen no sufría.
Mientras tanto, el Barça no se encontraba del todo incómodo en el partido, sabiendo que una contra o algún error del United podría romper el partido. Y eso casi ocurre. Pase de Semedo a Luis Suárez, pero su disparo se marchó al lateral de la red.
Valverde y los cambios
El Barcelona tenía que cambiar algo para empezar a tener más la pelota. Y eso ocurrió. El entrenador extremeño dio entrada a Arturo Vidal y a Sergi Roberto sustituyendo a Coutinho y a Arthur, por lo que el equipo catalán empezó a jugar con un 4-4-2.
Los de Valverde empezaron a dominar el partido tal y como ocurrió antes del primer gol y el United apenas inquietaba el área de Ter Stegen. El esférico era azulgrana y con sensación de que tenía controlado el partido llegando incluso a poder hacer el segundo gol del partido.
Con este panorama llegó los últimos diez minutos del partido con un United incapaz de acercarse al área de Ter Stegen y con un Barcelona que tenía el control del partido y apenas sufría. Los de Valverde consiguieron ganar por primera vez en Old Trafford poniendo pie y medio en las semifinales.