Madrid se convierte en la capital del fútbol este sábado 1 de junio. La final de la Champions League 2018/2019 sale a escena en el Wanda Metropolitano con el Liverpool y el Tottenham como actores principales. Algunos de los mejores futbolistas del mundo se dan cita en el estadio rojiblanco, donde destacan nombres como los de Van Dijk, Salah, Mané, Eriksen o Kane.
Dele Alli (Inglaterra, 1996) nació un 11 de abril en Milton Keynes bajo el nombre de Bamidele Jermaine Alli. Pese a que ahora triunfa en la Premier League e incluso se le ha llegado a vincular con clubes como el Real Madrid, lo cierto es que el jugador de ascendencia nigeriana no lo ha tenido nada fácil para llegar hasta aquí. Una familia desestructurada, mudanzas por medio mundo y una familia adoptiva que le cambió la vida.
El primer golpe llegó con apenas una semana desde su nacimiento. El pequeño Bamidele Jermaine fue abandonado por su padre Kehinde Alli, quien había viajado hasta Inglaterra para estudiar una Máster en De Monfort University. Fue durante una noche universitaria cuando conoció a Denise, la madre del ahora futbolista del Tottenham.
Después del abandono, madre e hijo continuaron viviendo en el suburbio de Milton Keynes con lo mínimo para sobrevivir, hasta que el padre regresó para hacer una promesa a su pequeño: un nuevo comienzo en Nigeria. Con tan solo 8 años, la vida de Dele Alli daba su primer gran giro cambiando las islas británicas por el continente africano.
La vida de Kehinde Alli había cambiado mucho desde que abandonase a su hijo en Inglaterra para volver a su Nigeria natal. Allí se había convertido en rey de la tribu Yoruba, una de las más grandes y poderosas de toda África, por lo que Dele Alli pasó de la pobreza y la necesidad de Inglaterra a ser uno de los príncipes africanos más importantes con 8 años.
De África a Inglaterra pasando por EEUU
Una mansión de diez habitaciones, tres criadas y recibir educación en un colegio con un costo de 27 mil dólares al año -algo más de 24 mil euros de la época-. Su vida en los tres siguientes año pasó de Nigeria a Houston, pero todo dentro de ese aura de lujo y opulencia que habían faltado en sus primeros años de vida. Pero un nuevo cambió llegó cuando tenía 11 años.
Tres años después de salir de Inglaterra decidió volver con su madre, ya que desde que abandonase Reino Unido no había vuelto a sentirse él mismo. De regreso en Milton Keynes comprobó que su madre Denise tenía ya otros cuatro hijos, de padres distintos, y un severo problema con las adicciones. Sin embargo, allí se pasó al 'lado oscuro'. Las armas, la delincuencia y las drogas eran habituales en su entorno. "Me junté con la gente equivocada desde una temprana edad", ha llegado a reconocer años después el futbolista.
Para salir de ese pozo, Dele Alli encontró en el fútbol su mejor vía de escape. "Me quedaba hasta las dos de la mañana en la calle. El fútbol me ha dado la oportunidad de realmente poner mi energía en otra cosa", aseguraba hace unos años el centrocampista. En el Milton Keynes Dons Football dio sus primeros pasos como futbolista, pero también le sirvió para encontrar la estabilidad 'familiar'.
Un nuevo comienzo
Las instalaciones del equipo no quedaban cerca de donde vivía con su madre, por lo que se trasladó a la cada de uno de sus compañeros de equipo y buen amigo, Harry. Su madre, Denise, señaló en una entrevista cómo fue su despedida, después de que la familia Hickford le adoptaron: "Él estaba muy animado y dijo 'te amo, mamá'. Pero no tenía ni idea de que esa sería la última vez que lo vería. Todavía estoy conmocionada".
En el MK Dons comenzó su ascenso al estrellato. Tenía cualidades naturales que le llevaron a entrar en el primer equipo a los 15 años. Militando en la Tercera División inglesa empezó a llamar la atención de clubes más grandes y fue clave para que su por entonces equipo lograse el ascenso de categoría. Ya en junio del 2016 fue cuando su vida cambiaría por completo después de que el Tottenham pagase 6 millones de euros por su traspaso.
Ya en su primer año consiguió ser nominado al prestigioso premio Golden Boy, además de ganarse un sitio en la selección de Inglaterra. De la mano de Pochettino, técnico de los spurs, y de Southgate, seleccionador inglés, ha ido creciendo hasta el punto que está a solo un paso de proclamarse campeón de Europa con el Tottenham en este 2019.
Los escándalos no le han sido ajenos en estos últimos años. Sus padres biológicos han dejado declaraciones en este tiempo sobre el nulo vínculo que mantiene el centrocampista con ellos. Ambos han comentado que han intentado acercarse a él, pero que este no ha querido volver a tener relación con ellos. Dele Alli no quiere saber nada de ellos, el gesto más claro es que en su camiseta solo luce su nombre de pila. Un genio del fútbol con una historia de película.
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