Los primeros días de Malcom en el Zenit San Peterburgo tras su salida del Barcelona están siendo una pesadilla. Su debut con el club ruso quedó empañado por culpa de parte de su nueva afición que exhibió en las gradas una pancarta en la que protestaban en contra de su fichaje... por su color de piel. "Gracias a los líderes por su fidelidad a las tradiciones", rezaba de forma irónica pidiendo que el club mantuviera su 'tradición' de no fichar jugadores de color.
"Para nosotros la ausencia de jugadores negros es solo una tradición, no somos racistas", decían en un comunicado anterior este grupo de radicales que ahora a puesto en peligro un fichaje que ha costado al Zenit 40 millones de euros. Y es que en Rusia se habla que este episodio podría acabar con la venta del brasileño en enero.
"El Zenit podría vender a Malcom en enero por problemas con el racismo. Los aficionados no le han aceptado", informa Ria Novosti citando a una fuente brasileña. El Zenit pensaría en su salida apenas unos meses después si su situación no mejora hasta entonces. Muchos ya catalogan esta decisión como una forma de ceder ante las presiones racistas de los aficionados radicales.
Malcom y Messi
Malcom parece no haber mejorado su situación con este traspaso tras su breve etapa en el Barça. Con el combinado azulgrana jugó poco más de 1.000 minutos en 24 partidos, marcando cuatro goles. Para llegar al Camp Nou tuvo que echar abajo en el último momento su traspaso a la Roma el pasado verano.
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