El pasado 1 de mayo, Iker Casillas vivió un contratiempo que dejó paralizado al mundo del fútbol durante unos instantes. El veterano guardameta español, actualmente en las filas del Oporto, sufrió un infarto en pleno entrenamiento. Esto provocó que se encendieran todas las alarmas y, afortunadamente, solo fue un susto del que ya está recuperado y el portero sigue trabajando para volver a estar al cien por cien.
Tras este episodio, el club portugués volvió a inscribir a Casillas para la liga portuguesa con el dorsal '1', y sobre la situación del portero, su entrenador Sérgio Conceiçao se ha desecho en elogios en la rueda de prensa previa al pistoletazo de salida del campeonato: "Iker es un campeón y los campeones nunca desisten. Ser inscrito a última hora es una señal de las ganas que aun tiene. Aun se siente jugador".
No obstante, el técnico del Oporto también quiso hacer un llamamiento a la tranquilidad valorando todos los factores, pues la edad de Casillas (38 años) y el percance sufrido el pasado mes de mayo hacen que se deban tomar ciertas medidas de seguridad para evitar malos mayores: "Teniendo en cuenta la edad de Casillas y su situación, la opinión del cuerpo médico es de extrema importancia".
Casillas, en un partido del Oporto
Una temporada diferente
Con ello presente, Iker seguirá una temporada más en las filas del Oporto, pero sus actuaciones serán medidas con total precaución. Fue el pasado 15 de julio cuando el club portugués comunicó que el guardameta español quedaba vinculado a la directiva del equipo mientras seguía recuperándose, pero más adelante han decidido que Casillas puede ser inscrito en la liga portuguesa para volver a vestirse de corto, siempre y cuando se valore que esté perfectamente preparado.
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