Adrián San Miguel (32 años, Sevilla) dio al Liverpool su cuarta Supercopa de Europa. El guardameta español fue el protagonista de la final tras atajar el último penalti de la tanda en la que se decidiría el partido. Una mano al disparo de Tammy Abraham que desató la euforia entre sus compañeros y la afición red, que ya tiene un nuevo héroe.
Adrián no podía contener la alegría tras el partido, como se puede apreciar en las declaraciones reproducidas por La casa del fútbol de Movistar+. No fue el único, ya que su entrenador Jurgen Klopp también protagonizaría a pie de campo otro icónico momento rindiéndose al portero andaluz.
"Estoy muy contento por el equipo, por haber conseguido este título y por jugar para el Liverpool aquí, con estos aficionados que han disfrutado en un partido muy largo pero con un final muy bonito para nosotros. Ha sido una semana loca", confesó Adrián tras el partido.
Entrenó con el UD Pilas de la Primera Andaluza
Y vaya si ha sido loca, como todo su verano. Adrián terminó contrato con el West Ham la pasada temporada. El verano lo pasó entrenándose por su cuenta a la espera de que llegaran ofertas. Para prepararse mejor acudió a las instalaciones del UD Pilas de la Primera Andaluza, cerca de su casa. En un entorno más humilde y doméstico recibió el cariño de un club amateur. Un gesto sorprendente tratándose de un portero de élite en el fútbol europeo, que ha jugado en equipos como el Betis o el propio West Ham.
Todo aquello lo mantuvo en secreto. Durante semanas no se supo nada de su aventura en el equipo andaluz, que ahora torna casi en el guión de una película romántica. Tras su preparación en el UD Pilas tendría un gesto que define su humildad: envió un cheque como agradecimiento para que el equipo pudiera comprar material deportivo.
Directo a la titularidad con el Liverpool
Si bien se esperaba que aceptara una oferta de algún club español, al final del cierre del mercado de la Premier League recibió la llamada del Liverpool para que fuera su segundo portero. Mignolet fichaba por el Brujas y Klopp necesitaba un suplente para Alisson. Suerte del destino, Adrián no tardaría en ponerse los guantes de nuevo por culpa (o gracias) a una lesión del guardameta brasileño, que estará en torno a tres meses fuera de los terrenos de juego.
Así le llegó su oportunidad para debutar el pasado fin de semana contra el Norwich en la primera jornada de la Premier. Contra el Chelsea se estrenaba como titular. En juego la Supercopa de Europa y, más allá de parar el decisivo penalti a Abraham, realizaría otras paradas de mérito durante el encuentro que mantuvieron vivo a su equipo.