Ansu Fati puede, desde este viernes, jugar para la Selección. El futbolista del Barcelona ha obtenido la nacionalidad española después de que la haya tramitado el Consejo de Ministros. La decisión se ha tomado este viernes y a propuesta de la ministra de Justicia, Dolores Delgado, el Consejo de Ministros aprobó un real decreto por los que se concede la nacionalidad española por carta de naturaleza al futbolista.
De está manera, la Federación Española de Fútbol podrá convocarle para que dispute el próximo Mundial sub17. El joven vive en España desde los seis años. Se trasladó con su familia a la localidad sevillana de la Herrera donde comenzó a jugar al fútbol. Militó en las filas de la localidad hasta que en el 2010 el Sevilla le fichó. Dos años después el Barcelona se fijó en él y el chico no dudó en trasladarse a la ciudad condal para jugar en el Alevín.
La solicitud ha sido presentada por la Real Federación Española de Fútbol y apoyada por el Consejo Superior de Deportes (CSD). El extremo derecho abandonó en 2013 las filas del Sevilla para firmar por el Barcelona con el que tiene contrato según la legislación FIFA contemplada para los menores de edad hasta el año 2022, con una cláusula de rescisión de 100 millones de euros
El 24 de julio firmó su primer contrato con el primer equipo culé con una cláusula de rescisión de cinco millones de euros. El 25 de agosto, ante el Betis, se convirtió en el segundo jugador más joven en debutar con la elástica blaugrana y seis días después, ante Osasuna en El Sadar, en ser el más joven en anotar un tanto.
Ansu Fati celebra junto a Jordi Alba con el Barcelona
La carrera de Ansu Fati ha pasado de cero a 100 en cuestión de semanas. Por eso el Barcelona pide calma y protección para su jugador, de tan solo 16 años. No quiere que se distraiga con otra cosa que no sea mejorar y madurar como futbolista. El delantero rechazó jugar con su país de origen Guinea-Busaú y con Portugal, y se decantó finalmente vestir la elástica del combinado nacional español.
[Más información: Ansu Fati pone en pie al Camp Nou y arrolla a un Valencia perdido]