Uno de los mejores futbolistas de principios de siglo fue Ronaldo de Assis Moreira (39 años, Brasil), más conocido como Ronaldinho. El ahora exjugador tuvo una larga carrera, ya que comenzó en 1997, año en el que firmó su primer contrato profesional con Gremio, y acabó en el 2018. Fue ahí cuando anunció de forma oficial que colgaba las botas, aunque llevaba algo más de dos años alejado de los terrenos de juego.
El comienzo de la historia de Ronaldinho como profesional se remonta al año 1998 cuando logró debutara con el Gremio de Porto Alegre. En Brasil no solo ha vestido estos colores, sino que también pasó por las filas del Flamengo y del Atlético Mineiro. Pero no solo eso, ya que también tuvo una aventura en el Querétaro de México.
La fama mundial no le llegó por su etapa en el continente americano, sino después de dar el salto a Europa. En el Viejo Continente ha formado parte de algunos de los mejores clubes de este lado del Atlántico como el PSG, el Barcelona y el Milan. Una vida dedicada al fútbol que se vio culminada en el Mundial de Corea y Japón del año 2002, momento en el que consiguió ganar la Copa del Mundo con la Canarinha.
Su carrera como futbolista estuvo salpicada de varias polémicas, pero también de muchos éxitos deportivos que le elevaron a la categoría de leyenda. No en vano tiene un Balón de Oro en su palmarés personal, conseguido en el año 2005. Además ganó otros importantes torneos como una Copa América (2013) o una Champions League con el Barcelona (2006).
El rey de la fiesta en Barcelona
A lo largo de las últimas décadas han sido muchos los jugadores que además de jugar como los ángeles, salían como diablos de fiesta. Ronaldo, Guti, Maradona... son muchos los ilustres nombres que eran famosos por alternar de noche y, entre ellos, Ronaldinho. Una vez incluso llegó a ponerse una careta para que nadie le reconociese. Y experimento fallido.
Esto llegó con un bajón en su rendimiento que achacaron a sus continuas salidas nocturnas. Germen de su final en Can Barça. Pero estas fiestas no solo fueron una constante durante su etapa como blaugrana, sino que son muy reconocidas también las que se corría cuando vivía en París.
Más problemas tuvo en años posteriores. En el Milan unos hinchas rossoneri enfurecidos le mandaron a casa, mientras que en el Flamengo le perseguían por las discotecas para que se fuese a dormir y no bajase aún más en forma. Capítulos llamativos y que hicieron correr ríos de tinta
Precisamente en Milán fue noticia por una fiesta que duró tres días y en la que se estima que llegó a gastar unos 75 000 euros. Una suite en un lujoso hotel, bellas modelos y una derrota tras este episodio frente al Inter del que fue el principal señalado. Y de Europa a Brasil.
Ronaldinho militaba en las filas del Atlético Mineiro en el año 2014. Fue entonces cuando tras ganar la Copa Libertadores y la Recopa Sudamericana se fue de fiesta y no volvió. En el club supieron de él por sus fotos de fiesta en las redes sociales. Después de eso su hermano rescindió su contrato y acabó en el fútbol mexicano. Historias para no dormir y muchas que no serán nunca reveladas.
Escándalos sexuales
Fiestas y mujeres. Dos de las cosas que más le gustan en el mundo a Ronaldinho. Famosísima es la anécdota que tuvo lugar en el año 2007. El organizador del festejo no fue en esta ocasión el ex del Barça, sino que fue Robinho el que lo orquestó todo. El escenario, Brasil. El momento, una fecha FIFA. Los protagonistas, los miembros de la plantilla de la Canarinha. La curiosidad, 40 condones.
Del jueves por la noche al mediodía del viernes duró la fiesta en la que los focos se centraron en un Ronaldinho que tuvo que salir de la celebración, alrededor de las 11 de la mañana, en el maletero de un coche para evitar ser captado por los fotógrafos que le esperaban. Siempre rodeado de bellas mujeres y jactándose de ellos con imágenes sexistas en sus redes sociales, Ronaldinho presuntamente también protagonizó un vídeo, vía webcam, en el que se le veía masturbándose.
De la ruina a la política
El pasado 2018 se reveló que al brasileño le quedaban menos de 6 euros después de que la Fiscalía de su país le interviniese sus cuentas. El motivo de esto no fue otro que la construcción ilegal en un área protegida y se le requerían por ello un total de 2 millones. Sin embargo, la polémica volvió a salir a relucir ya que las imágenes vistas de él en sus redes sociales dejaban muestra de una vida a todo trapo y de varios compromisos publicitarios con marcas como Nike.
Este fue un duro palo para él. Su leyenda ha ido cayendo en desgracia y es su acercamiento a la extrema derecha el último escándalo del que ha sido el actor principal. Apoyo a Bolsonaro público que le ha traído numerosas críticas de los que antes le idolatraron. El actual presidente de Brasil le considera un espectacular imagen para su partido y por ello ha sido nombrado por su ejecutivo como Embajador de Turismo del país. ¿Lo más llamativo? Que Ronaldinho pese a este título no puede salir de Brasil por sus líos con la Fiscalía.
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