El Leganés consiguió la primera victoria de la temporada al imponerse al Mallorca por 1-0 en el debut de Luis Cembranos como técnico del equipo madrileño, que cortó la buena racha del conjunto balear. [Narración y estadísticas: Leganés 1-0 Mallorca]
Era un encuentro fundamental para unos y otros, de los que al final de la temporada pueden marcar la diferencia entre la permanencia y el descenso. Así lo tenían asumido dos conjuntos que, pese a todo, afrontaban la presión de manera diferente.
Más sensación de ahogo transmitían los locales, colistas con solo dos puntos en las nueve primeras jornadas e inmersos en esa incertidumbre que acarrea la presencia de todo entrenador interino. O al menos ese es el papel que se le supone, de momento, a Cembranos.
Mucho se jugaba, pero no le tembló el pulso para llevar a cabo un par de modificaciones sustanciales. Así, la habitual línea de cinco en defensa mutó a una de cuatro y dos piezas importantes como el nigeriano Kenneth Omeruo y el marroquí Youssef En-Nesyri se quedaron fuera de la convocatoria, sin que en la previa se diese a entender que tenían algún tipo de problema físico.
Enfrente, un Mallorca con la moral por las nubes después de dos victorias consecutivas, ambas en casa y la segunda contra el Real Madrid. Lejos de Son Moix, su realidad era más cruda, pues contaba todas sus visitas por caídas.
Hubo ritmo en el arranque, con el esférico circulando de manera fluida entre las áreas, pero sin peligro, ya que en los metros finales faltó claridad hasta que Dani Rodríguez puso a prueba a Iván Cuéllar con un disparo desde la frontal. Era el minuto 8.
Languideció a partir de ahí el enfrentamiento entre dos equipos atenazados que esperaban su momento. Forzaron los bermellones algún córner sin conscecuencias, pero el que acabó golpeando fue el anfitrión.
Primero avisó Carrillo con un tiro desviado y acto seguido, sin que el rival hubiera podido apenas reponerse de la amenaza, una pared en el costado derecho entre Rosales y Óscar Rodríguez dejó al venezolano en disposición de centrar. No llegó Carrillo a cabecear por centímetros en el primer palo, pero sí Braithwaite, que se adelantó a su par para hacer el 1-0.
Se crecieron entonces los blanquiazules, dominadores hasta el descanso, y pudieron ampliar la cuenta en un cabezazo en posición incómoda de Jonathan Silva en el interior del área que se perdió lejos de la portería.
De vuelta al césped, la iniciativa cambió de bando y el Mallorca fue más incisivo, pero sin crear demasiados problemas al Leganés, por lo que Vicente Moreno intentó buscar una marcha más con la entrada de Kubo y Trajkovski.
No cambió el panorama. Y, de hecho, pudo ser peor para el Mallorca superado el minuto 70 cuando Martin Braithwaite capturó un balón muerto tras una falta y, con todo de cara, reventó el larguero con un potente impacto.
A partir de esa jugada, los de casa se centraron en mantener su ventaja. Hubo sufrimiento en las gradas, especialmente cuando Raíllo malogró una excelente ocasión y Trajkovski disparó cerca de un poste. También un conato de alegría, pero Arnáiz falló un mano a mano entre los reproches airados de Braithwaite por no darle un pase que hubiera sido de gol.
El equipo madrileño, no sin sufrimiento, selló un triunfo vital que le permite tomar un poco de aire y afrontar con más moral el próximo desplazamiento al Santiago Bernabéu.