El Getafe no pudo superar el muro construido por Osasuna y ambos equipos firmaron un empate sin goles en el Coliseum Alfonso Pérez en un partido con pocas ocasiones que desbarató el debutante por 'accidente' Sergio Herrera. [Narración y estadísticas: Getafe 0-0 Osasuna]
En una semana en la que se ha celebrado el 30 aniversario de la caída del Muro de Berlín, el conjunto navarro hizo honor a la fecha y se atrincheró en el feudo del conjunto azulón, que dominó muchos tramos del partido con escasas ocasiones que no llegaron a buen puerto. Apenas tres, al final, de Jorge Molina y del uruguayo Mauro Arambarri, que salvó Herrera con un par de paradones.
El portero suplente de Osasuna fue decisivo por azar. La lesión de Rubén Martínez en la primera parte provocó su salida al terreno de juego y sus intervenciones fueron sin duda claves para el cuadro navarro.
Y es que, tras los pinchazos del Granada en las tres últimas jornadas, Getafe y Osasuna aspiraban a convertirse en los equipos de moda de la competición. Ambos, entre los humildes, y junto a la Real Sociedad, un escalón por encima, son claramente las sorpresas agradables de La Liga.
Además, el premio no era sólo ese, un premio simbólico. En juego también estaba acercarse a los puestos europeos e incluso instalarse en ellos. Y ambos equipos llegaban a la cita en un buen momento, con el Osasuna celebrando su récord de partidos invicto en el estadio El Sadar y con el Getafe feliz tras sumar cuatro victorias en sus últimos cinco encuentros de Liga.
Aunque a los hombres de José Bordalás se les atragantó el Basilea hace días en la Liga Europa, las señales no eran malas en el conjunto azulón. Perdió en Suiza 2-1 con un tanto mal anulado a Ángel Rodríguez por fuera de juego. Sus jugadores, aquellos que perdieron, fueron todos, excepto el serbio Nemanja, sustituidos en masa para afrontar el choque ante Osasuna.
Mientras, Jagoba Arrasate apostó por empantanar el juego con cinco defensas. Colocó al argentino Facundo Roncaglia en el lateral derecho y adelantó por delante de la línea de cuatro zagueros a Nacho Vidal. De ese modo, construyó un muro casi imposible de traspasar.
Jugó a resistir y a golpear en alguna jugada esporádica. Lo primero, lo consiguió en la primera parte. Lo segundo, no. Sólo inquieto con un disparo de Roberto Torres. Nada más. Y, el Getafe, con el brasileño Robert Kenedy insistente pero con la dupla Maksimovic-Arambarri del centro del campo desaparecida, apenas generó ocasiones.
Fueron de Ángel, con un voleón que repelió el portero Rubén Martínez antes de abandonar el terreno de juego con dolores en la rodilla derecha tras chocar con el delantero del Getafe, y de Jason Remeseiro, que se encontró con el cuerpo de Aridane Hernández en un remate con buena dirección.
No hubo nada más que un atasco tremendo en el que nadie avanzaba. El Getafe lo intentó más, pero no encontró huecos entre tantas piernas. Marc Cardona, otra de las novedades del once de Osasuna, se peleó contra el mundo arriba. Al final, los primeros 45 minutos fueron estériles.
Tras la reanudación la tónica fue la misma. Sin modificaciones en los esquemas, en las ideas y en los jugadores, todo siguió igual. Incluso, Osasuna consiguió poco a poco comer terreno a su rival, al que se le fueron apagando las ideas.
Aún así, el cuadro navarro tampoco se prodigó en ocasiones. Su paso al frente no sirvió para nada, apenas para un cabezazo de Rubén García tras un saque de falta que detuvo sin problemas David Soria, mientras que otro cabezazo de Ángel inquietó a Sergio Herrera.
Entonces, Bordalás y Arrasate agitaron un poco los banquillos con la entrada de Jaime Mata y de Brandon Thomas. En los últimos veinte minutos, el Getafe, con tres delanteros, volvió a tomar la iniciativa para acercarse a la victoria.
La tuvo en su mano Jorge Molina, pero remató al larguero una ocasión a bocajarro clarísima cuando tenía todo a favor para adelantar a su equipo. Prácticamente fue el único ladrillo que abrió Osasuna de su muro, que también se asustó con dos zapatazos del uruguayo Mauro Arambarri bien salvados por el héroe Sergio Herrera.
Al final, ni con tres delanteros sobre el campo el Getafe fue capaz de marcar para llevarse tres puntos con los que habría acabado la jornada en puestos europeos. Osasuna, con una buena propuesta defensiva y con la sobresaliente aparición de Herrera, sacó un punto muy valioso en un estadio complicado como el Coliseum Alfonso Pérez.