Este viernes el Estadio de La Cerámica acogerá el Villarreal - Atlético de Madrid. Esa sentencia parece la habitual de cualquier previa, pero la intención de Javier Tebas y LaLiga era bien distinta con este partido. Este encuentro estaba previsto que se disputase en Miami, en el Hard Rock Stadium, pero la justicia lo ha vuelto a impedir.
El juzgado de lo Mercantil nº 12 de Madrid desestimó las medidas cautelares sobre la autorización por parte de la federación para que se pudiera celebrar el encuentro el pasado 15 de noviembre. Después del Girona - Barcelona de la temporada pasada, La Liga ha intentado por segunda vez consecutiva llevar un partido de la competición nacional a Estados Unidos, y por segundo año se ha encontrado con la Real Federación Española de Fútbol y con la justicia.
Javier Tebas y Luis Rubiales
Ambos equipos estaban de acuerdo con viajar hasta Miami para esa fiesta en el Hard Rock Stadium al hilo de lo que considera el organismo de LaLiga como "una estrategia a largo plazo para el crecimiento internacional". Aún habrá una cita en la justicia en febrero de 2020 donde se decidirá de cara al futuro la legitimidad para que se celebren estos partidos, momento que el máximo organismo del fútbol profesional español espera que sirva para "llevar a cabo la organización de un partido oficial fuera de nuestras fronteras".
Pero, la RFEF considera que "este tipo de medidas resienten la relación con el aficionado local, al no poder acudir a su estadio para ver el partido", y, con el beneplácito de la justicia en primera instancia, se ha salido con la suya. Aunque sea distinta su perspectiva a la hora de llevar la Supercopa de España a Arabia Saudí.
El problema de las aficiones
Como exponía ese comunicado de la RFEF, las aficiones eran el gran problema para la consolidación de esta idea, aparte de la adulteración de la competición que algunos clubes instigaron. Pero en un principio no iba a haber ningún problema con la del Villarreal.
Los jugadores del Atlético celebran uno de los goles del partido
Fernando Roig, presidente del Villarreal, al anunciar el acuerdo con La Liga y el Atlético de Madrid, anunció también los beneficios con los que contaría la afición: "600 entradas gratis y plazas para viajar en vuelo charter ida y vuelta con noche de hotel en Miami; 3.000 entradas para el Atleti-Villarreal con Ave Charter de Castellón a Madrid y noche de hotel; descuento de un 40 por ciento en el abono del año que viene y un 20 por ciento de descuento sobre el de esta temporada".
El Atleti no anunció ningún beneficio de cara a que sus aficionados participasen de forma más activa en este partido por el hecho de que no había completa seguridad de que se pudiera celebrar el encuentro. Pero sí que iba a ser una buena noticia para la peña que el equipo tiene en Estados Unidos, concretamente en Miami.
La alerta deportiva
La realidad es que los dos clubes llegan en las horas más bajas de sus respectivas temporadas. El Atlético ha sumado tres victorias en las últimas doce jornadas y, tras la derrota ante el Barça, se han alejado de la lucha por el título. Pero el Villarreal tampoco es que llegue en una situación mucho mejor: solo ha sumado un punto de los 15 que ha disputado en los cinco partidos previos a este.
Los jugadores del Villarreal celebran un gol
Jan Oblak sufre su peor racha de encuentros encajando gol con los siete últimos partidos. El gran muro de Simeone no está mostrando la contundencia que venía demostrando desde su llegada al banquillo del Atlético. Sería una de las maneras de explicar que el equipo colchonero lleva seis partidos consecutivos sin ganar, un lastre demasiado pesado para una plantilla que quiere luchar por el campeonato.
Para buscar la victoria, Simeone volverá a contar con Santiago Arias y Renan Lodi en los laterales, repetirá los cuatro centrocampistas del partido frente a la Juventus, Héctor Herrera, Saúl Ñíguez, Thomas Partey y Koke Resurreción, y, por segundo partido consecutivo, Joao Felix y Álvaro Morata serán los delanteros.
Con un inicio de temporada con el que se colocó cerca de los puestos europeos, la mala racha del Villarreal ha supuesto que se haya desinflado el efecto Calleja. El entrenador del 'Submarino Amarillo' tendrá la duda de Santi Cazorla hasta minutos antes del encuentro, mientras que podrá volver a contar con Vicente Iborra.
Con estas novedades, lo normal es que, con Asenjo en portería, repita la línea defensiva del derbi de la Comunitat Valenciana con Rubén Peña, Raúl Albiol, Pau Torres y Xavi Quintillà y mantenga los tres centrocampistas de corte más físico con Iborra, Zambo Anguissa y Manu Trigueros. Para el ataque los elegidos serían Toko Ekambi, Gerard Moreno y Moi Gómez.
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