Un gol de Giovani Lo Celso sirvió al Tottenham Hotspur para derrotar al Everton (1-0) en un encuentro marcado por un encontronazo entre Hugo Lloris y Heung-min Son. Los tres puntos fueron lo de menos para un Tottenham que tuvo que ver cómo su capitán, Lloris, y uno de sus mejores jugadores, Son, se enfrascaron en una disputa al descanso.
Cuando el árbitro señaló el final de la primera parte, Lloris salió corriendo en busca de Son, para reprocharle algo. Los dos futbolistas tuvieron que ser separados por sus compañeros.
El enfado en cuestión de Lloris llegó después de que el Everton amenazara su portería justo antes del descanso. Son no bajó a defender y tras la acción, que terminó con un disparo fuera de Richarlison, el portero francés se echó encima de su compañero para recriminarle su actitud. Lloris empujó a su compañero hasta que fue separado por el resto de los jugadores de los Spurs.
La respuesta de Mou
Pero casi tan sorprendente como la escena fue la respuesta de su entrenador, José Mourinho, al ser preguntado por el incidente. "Lo que pasó fue hermoso. Si quieren culpar a alguien de lo que ocurrió, ese soy yo", dijo el técnico portugués con una sonrisa en su rostro.
Mourinho junto a Heung-Min Son en el Tottenham
"Fui muy crítico con mis chicos porque ellos no eran lo suficientemente exigentes con ellos mismos. Les pedí que fueran más rigurosos con ellos mismos y más exigentes con el otro", justificó el técnico luso. "Les pedí que se demuestren ese espíritu de equipo para que todos dieran todo".
Al final del primer tiempo sucedió lo de Son. Él es un chico increíble que todos quieren y que juega en equipo. Pero en ese momento Lloris pensó que tenía que dar más. No sé si fue un poco forzado o no, pero fue importante para que el equipo creciera. Porque para que el equipo crezca, deben exigirse unos a otros y tener personalidades fuertes. Me complació mucho. Les dije en el descanso que no tenía dudas de que se mantendrían juntos hasta el final", concluyó Mou.
Victoria para el Tottenham
Antes del incidente, el argentino Lo Celso abrió el marcador para el Tottenham. El centrocampista sacó un disparo con la zurda a la media vuelta, con tal suerte que tocó en Michael Keane y desvió la pelota a la portería.
Ya en la segunda parte, el encuentro transcurrió con normalidad y Lloris y Son no tuvieron nuevos problemas. El juego ramplón de ambos conjuntos provocó que no hubiera más goles y apenas ocasiones.
José Mourinho se conformó con la victoria por la mínima y Carlo Ancelotti no acertó con el cambio que diera otro aire al partido y les ayudara a sacar algo positivo de Londres.
Los Spurs mantienen la esperanza de alcanzar puestos europeos y se colocan octavos con 48 puntos, a cuatro del Wolverhampton Wanderers, que es sexto. El Everton se despide de cualquier oportunidades de acceder a Europa la temporada que viene y es undécimo, con 44 unidades.
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