Día duro y complicado en Can Barça. La resaca del título de Liga del Real Madrid sabe amarga en la ciudad condal, donde los ánimos son bien distintos y la confianza es muy baja tras haber perdido el campeonato liguero. Duele ver al eterno rival campeón y duele haber caído de la manera en qué se hizo. Los principales señalados son dos: Quique Setién y Josep María Bartomeu.
No ayudaron las palabras de Leo Messi tras la derrota ante Osasuna. El delantero argentino no se mordió la lengua y señaló a Setién y su staff técnico. "De enero a acá", dijo para referirse a la caída progresiva del Barcelona. Hay que recordar que fue a comienzos de año cuando llegó el técnico cántabro en lugar de Ernesto Valverde, destituido por Bartomeu tras la Supercopa de España.
Las cosas en Can Barça están al rojo vivo y Bartomeu tiene una patata caliente en sus manos con el conflicto abierto entre algunos jugadores, liderados por Messi, y Setién, cada vez con menos apoyos dentro del vestuario. Es por eso, que el presidente culé querría saber de primera mano cómo están los ánimos dentro del vestuario y las propias sensaciones del entrenador. Así, en Mundo Deportivo desvelan que este viernes se producirá una reunión entre los dos protagonistas.
Bartomeu, que aseguró la continuidad de Setién hasta final de temporada días atrás, quiere hablar con Setién para conocer cómo se encuentra tras perder La Liga y con la Champions League a la vuelta de la esquina. Preocupa el discurso de Messi de este jueves: "Vamos a tener que cambiar muchísimo porque si no el partido ante el Nápoles, lo vamos a perder también", dijo el argentino.
Dudas para el Nápoles
Solo quedan tres semanas para que el Nápoles visite el Camp Nou y el Barça debe ganar tras empatar a uno en San Paolo. Que esté Setién en el banquillo para entonces empieza a ser una incógnita, aunque para esta jornada no se espera que el cántabro sea despedido. Pero ni él mismo asegura estar para el regreso de la Champions: "No lo sé, espero", dijo en rueda de prensa tras el partido ante Osasuna. Muchas dudas y mucha tensión se respira en el ambiente culé.
Horizonte también muy complicado en el seno del Barça. Echar a Setién obligaría a buscar un recambio de forma exprés para afrontar la Champions y se volvería a partir de cero de cara a la próxima temporada, la última de Bartomeu en la presidencia. Que Setién siga o no el curso que viene está por ver. Sí lo hará Bartomeu, que no tiene pensado adelantar las elecciones a la presidencia y marcharse por la puerta de atrás tras esta nueva debacle del equipo.
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