Este lunes Javier Tebas, presidente de LaLiga, avisaba de la posibilidad de nuevos contagios al regreso de las vacaciones de los jugadores. "Ya veremos cómo vuelven para jugar Europa y la próxima Liga", afirmó.
Solo 24 horas se confirmó el primer positivo por coronavirus tras las minivacaciones de los equipos que disputarán en agosto competiciones continentales. Mariano, futbolista del Real Madrid, se mantiene confinando en su casa tras haber sido detectado el Covid-19 en su organismo.
Solo los estrictos protocolos del Real Madrid evitaron un mal mayor. El club blanco realizó los test a los jugadores en su casa, por lo que ningún compañero tuvo oportunidad de mantener contacto con Mariano tras su regreso de los días libres después de haber ganado la 34ª Liga.
El hispano-dominicano se siente bien y tranquilizó a todos con un vídeo grabado en su domicilio. El delantero había pasado unos días junto a familiares y amigos en la costa catalana, los cuales han dado negativo en las pruebas. El futbolista mostró en las redes sociales cómo fueron sus días libres y en todas las imágenes excepto en una no lleva la mascarilla, que es obligatoria en Cataluña tras ser una de las zonas más afectadas por los rebrotes.
Sin embargo, el caso de Mariano no ha hecho más que alertar tanto a la UEFA como a LaLiga. Las vacaciones de los futbolistas ponen en peligro no solo la disputa de la Champions y de la Europa League en agosto, sino también el reinicio de la competición nacional en septiembre.
Actitudes irresponsables como las de Banega, pillado de fiesta y sin mascarilla, ponen de nuevo en jaque al fútbol en un momento en que los rebrotes están azotando a Europa y, especialmente, a España.
El 'caso Fuenlabrada' tampoco ayuda a ser optimista con la situación en los próximos meses. El fútbol ha vuelto, pero se pueden vivir momentos muy complicados si los jugadores no son responsables durante este tiempo y, sobre todo, en vacaciones.
Un repunte de casos entre futbolistas podría poner en peligro la disputa de la Champions. En el caso del Mariano, solo el buen hacer del Real Madrid ha impedido que existiera una alta posibilidad de contagio en la plantilla cuando solo faltan dos semanas para que se dispute el encuentro de vuelta de los octavos de final contra el Manchester City.
El futuro actualmente es incierto en todas las esferas de la sociedad y el fútbol no se queda atrás. A pesar del éxito que ha sido la reanudación y la conclusión del campeonato liguero, la posible relajación de los jugadores y el crecimiento de positivos en España hacen que, cuanto menos, la situación sea en estos momentos más que preocupante.
La Champions, el gran test
Tanto LaLiga como la UEFA van a seguir estudiando los protocolos para mejorarlos. Ahora el foco está sobre la Final a ocho de la Champions que se celebrará en Lisboa entre los días 12 y 23 de agosto.
El objetivo inmediato del mundo del fútbol es terminar sin positivos la máxima competición continental. Una prueba de fuego para la industria, ya que hasta ahora se han celebrado encuentros entre equipos de los mismos países, pero no de distintos estados con situaciones tan diferentes en esta guerra contra el Covid-19.
Para la UEFA y LaLiga es importantísimo que no exista un nuevo parón, ya que la recesión es un hecho y una nueva suspensión del calendario traería unas consecuencias catastróficas para una de las industrias dominantes en la economía mundial.
Así que ahora todos los mandatarios se plantean esta lucha partido a partido, que diría Simeone. Eso sí, los rebrotes y las vacaciones de los futbolistas ponen en jaque de nuevo al fútbol y los clubes tienen especial miedo a que sus jugadores se contagien durante sus días libres. Solo la responsabilidad de cada uno puede evitar que el deporte rey vuelva a sufrir un parón que sería catastrófico.
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