El efecto Simeone se agota en el Atlético de Madrid: la caída de un estilo y una resurrección que no llega

A estas alturas ya se podría decir que el Atlético de Madrid atraviesa por una crisis de resultados. La eliminación en cuartos de final contra el RB Leipzig ha puesto el punto y final a una temporada que bien puede ser considerada la peor de los colchoneros desde que el equipo ganará La Liga en la temporada 2013/2014. Aquel año se alcanzaron las semifinales de la Copa del Rey y la final de la Champions League, en la que se cayó contra el Real Madrid en Lisboa. Siete años después los resultados son bien diferentes.

Para empezar hay que hablar de lo más reciente: la Champions. Se ha mejorado el papel de las dos ediciones anteriores: en la 2017/2018 se cayó en la fase de grupos y luego se ganó la Europa League y la 2018/2019 fue eliminado por la Juventus en octavos de final tras una remontada comandada por Cristiano Ronaldo en la vuelta. Este año se avanza una ronda más, pero no se puede considerar un triunfo. Más bien es un fracaso. Primero porque el Atleti era favorito y segundo porque el Leipzig fue mejor.

Peor ha sido el papel en la Copa del Rey, donde el Atleti cayó en dieciseisavos de final contra la Cultural Leonesa, equipo de Segunda B. Un sonado fiasco copero que es, además, el peor resultado rojiblanco en Copa desde 2011/2012 cuando se cayó ante el Albacete en 32avos. El peor resultado desde que se ganó en 2013, siendo el segundo el cosechado la pasada campaña: octavos de final cayendo ante el Girona.

Y en Liga, más de lo mismo. El Atleti no baja del tercer puesto, aunque durante gran parte de la temporada lo vio peligrar e, incluso, los puestos de Champions. Pero la diferencia con el primero, el Real Madrid, es también la más alta en los últimos siete años. Un total de 17 puntos por debajo del campeón, que resaltan como los resultados en Copa y Champions la decadencia de este equipo que lleva las últimas temporadas en una progresión descendente y sin atisbos de resurrección.

Crisis de resultados

Los resultados mandan y estos dicen que el agotamiento del Atleti de Simeone es real. Los peores resultados desde que en 2014 se tocara techo con el título de La Liga y la final de Lisboa. Desde entonces ha sido casi una caída gradual año tras año hasta sumar un nuevo fracaso contra el Leipzig en Champions, pese a lo altas que estaban las expectativas de cara a la actuación de los rojiblancos en esta Final a 8.

El estilo del 'Cholo' pasa por horas bajas en su Atleti, aunque Enrique Cerezo asegura que nadie discute al técnico argentino. El Leipzig le ganó, quizás, con la que ha sido la mejor arma rojiblanca con Simeone en el banquillo: la intensidad. Los alemanes fueron mejores, pero también le pusieron más ganas contra un Atleti que solo se erguió en los minutos previos al gol de penalti que puso el empate.

Las piezas no encajan

Tampoco ayudaron las decisiones de Simeone, desde alinear en el once a un Diego Costa y un Koke que sufren el paso del tiempo y están a años luz de su mejor rendimiento y dejar en el banquillo al jugador que seguramente tiene más talento de su plantilla: Joao Félix. El luso fue el único rayo de luz y llevó a sus compañeros hasta el empate, pero luego no fue acompañado por ellos. También fue suplente Morata.

Al 'Cholo' le pesa también no haber sacado (casi) nada bueno de Lemar desde su fichaje. Aunque ante el Leipzig tampoco contó ni un solo minuto con Vitolo. Parece como si el argentino siguiera echando de menos a los Godín, Lucas, Rodri y Griezmann que salieron el verano pasado. La renovación del equipo no ha funcionado, aunque todavía tiene un voto de confianza para la próxima temporada. Y menos mal que sigue Oblak, dirá alguno.

¿Es la última bala de Simeone en el Atlético? ¿Le queda crédito solo para otro año? Su salida se rumoreó con fuerza en diversas fases de la temporada, pero parece que continuará un año más. La historia que se repite durante las últimas campañas. Al menos, este año la afición rojiblanca tuvo la alegría de Anfield que fue una de las noches más memorables del equipo en Europa. Pero los fracasos en el Atleti y Simeone cada vez da menos sensación de resurrección con su Atleti.

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