Neymar Jr. fue el principal responsable de eliminar al RB Leipzig de la Champions League y guiar a su Paris Saint-Germain (PSG) hasta su primera final en la máxima competición continental. Red Bull, el principal patrocinador del equipo alemán y la marca que ha llevado a esta entidad a crecer en poco más de 10 años desde el anonimato a la élite, también trabaja con el astro brasileño y ambos han tenido un pique particular en las redes sociales.
Empezó el líder de este PSG a picar a la marca de bebidas energéticas a través de su cuenta de Instagram nada más acabó el partido con un mensaje: "Pai ta na final" (Papá, estamos en la final). Red Bull no se hizo de rogar y contestó a través de su cuenta de Twitter en brasileño: "Aí você vai lá, dá asas e ele faz isso. Hoje passa, Neymar", algo así como "Vas a por él, le das alas y nos hace esto. Por hoy pasa, Neymar".
Buen rollo entre las dos entidades que evidencia que Neymar es uno de los jugadores que mejor vende la publicidad en la actualidad. La imagen del brasileño simplemente con este troleo ha implicado una gran cantidad de interacciones en los dos sentidos, con la empresa de bebidas energéticas como gran beneficiada. Además de ser uno de los más decisivos en el campo, el sudamericano es una máquina de hacer dinero.
El PSG no solo fichó al jugador destinado a pelear con Cristiano Ronaldo y Messi el Balón de Oro, también consiguió uno de los cuerpos más cotizados para poner sobre él dinero publicitario. El club solo se ha beneficiado de esto, ya que deportivamente no ha sido hasta este año que al menos han conseguido el reto de meterse en la final de la Champions League.
Neymar, clave
El brasileño fue el jugador más activo del encuentro desde el minuto uno, aunque finalmente se fuera sin anotar. Apoyado en Mbappé y un Di María superlativo, volvió loca a la defensa del Leipzig. Provocó faltas peligrosas, encaró una y otra vez, condujo contraataques... En definitiva, fue una fuente de oportunidades para, por fin, lograr el reto que tanto tiempo llevaba buscando.
Al final fueron los secundarios los encargados de hacer los goles. Marquinhos, Di María y Bernat batieron a Gulacsi, pero sin el brasileño no habría sido lo mismo. El '10' acostumbraba a perderse las grandes citas con el PSG en la máxima competición continental. Pero este año sí que estuvo sobre el campo y puso encima del césped toda la calidad que tiene.
Ahora le queda dar la puntilla: ser el responsable de que el PSG gane la primera Champions de su historia. Para eso el conjunto parisino desembolsó 222 millones en las arcas del Barça. Con el mismo objetivo pagó una cantidad desorbitada por un jugador de 19 años como Mbappé. El jeque está más cerca que nunca de su gran objetivo.
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