Leo Messi sigue deshojando la margarita de su futuro, un futuro que podría haber cambiado en las últimas horas. El argentino tenía la esperanza de que el Barcelona terminase cediendo y aceptara negociar su salida, sin embargo, la posibilidad de continuar un año más en el Barça está cada vez más cerca, tal y como ha comentado su padre esta misma mañana.
El futbolista tenía la esperanza de que con la llegada de Jorge Messi a Barcelona, la situación se calmase y se tranquilizase. Para ello se concertó una reunión en la que estuvo presente el padre del jugador como representante del entorno del '10'. Bartomeu ya había rechazado reunirse con los abogados de Leo de forma amistosa al no aceptar la propuesta de su salida.
Para el presidente Josep María Bartomeu, la única salida es la de aceptar la renovación, evitando así que Leo pueda salir al año que viene completamente gratis, algo que supondría un desastre igual y que tendría pagar el nuevo presidente que resulte de las elecciones que se celebran el próximo año. El argentino puede pactar su salida con el equipo que desee desde el mes de enero.
Mientras tanto, tal y como informa Mundo Deportivo, Messi permanece en su casa donde se le ha podido ver hoy disfrutando de un partido de pádel junto a su amigo y compañero Luis Suárez, y junto a su persona de máxima confianza, Pepe Costa. La persona que le puso el club para acompañarle en todo momento y que se ha convertido en un inseparable de Leo durante su carrera en el FC Barcelona.
El argentino parece estar relajado y tranquilo mientras pasa unas horas que pueden ser clave para su futuro. En el lado del jugador ya saben que el club no va a negociar su salida bajo ningún concepto y la situación del '10' podría tener fecha de caducidad. Mientras tanto, Messi sigue sin presentarse en la ciudad deportiva del FC Barcelona ni para pasar las pruebas PCR ni para asistir a los entrenamientos en lo que está siendo su labor para tensar la cuerda lo máximo posible.
El futuro del argentino está cada más destinado a terminar en un callejón sin salida ya que, de solicitar el transfer provisional para poder salir, lo más factible es que ningún equipo se atreva a llevar a cabo la operación porque tendría que ser un juez quien determinase el precio del argentino y eso podría conllevar un desastre económico sin precedentes en el mundo del fútbol.
Reunión tras una mañana de relax
Quizás por eso, Leo prefiere mantener relajado, practicando deporte y esperando acontecimientos hasta agotar el poco tiempo del que dispone antes de tener que tomar una decisión que cada vez apunta más a la de permanecer en el Barça. Habría que ver si decide quedarse, pedir perdón y vuelve a asumir los galones del equipo, o si por el contrario se queda, pero rechaza jugar con el Barça y se mantiene un año en blanco hasta que en enero pueda negociar libremente su marcha.
Tras el partidillo de padel, se ha podido ver a Jorge Messi llegando a la casa de Leo para transmitirle las últimas noticias y seguir discutiendo así qué posibilidades tienen y qué hoja de ruta toman para intentar pelear por el deseo del jugador, que no es otro que el de salir.
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