Cada día que pasa, el FC Barcelona descubre un nuevo escándalo. Es de sobra conocido que la relación entre la plantilla y la directiva está totalmente rota, así como que la situación económica del club es realmente mala. Sin embargo, ahora han surgido nuevas informaciones que apuntan directamente a una cierta desunión en el vestuario.
La realidad del conjunto catalán es que está sumido en una crisis económica profunda que tiene difícil solución. El club lleva muchos años gastando por encima de sus posibilidades e hipotecando su futuro, especialmente con una escala salarial completamente desorbitada.
Hasta el momento, han ido subsistiendo con artimañas financieras para aplazar sus problemas, dejándolos pasar de un año a otro, de un ejercicio al siguiente en lo que ha sido únicamente una huida hacia delante poniendo parches a los múltiples pinchazos que tienen y que seguramente tendrán en un futuro muy cercano.
Josep María Bartomeu, durante el partido entre el Barça y el Sevilla
Sin embargo, no hay que esperar mucho para que todo salte por los aires. Con lo que no contaba el FC Barcelona, ni nadie evidentemente, es que llegaría una profunda crisis económica a causa de una pandemia sanitaria, lo que ha provocado que la situación del club estalle completamente por los aires, pasando de muy grave a crítica. Ahora, Josep María Bartomeu busca soluciones a la desesperada.
La última que se le ha ocurrido es pedirle a las plantillas del primer y segundo equipo una nueva rebaja salarial, algo que ya hicieron al estallido de la crisis del coronavirus. Sin embargo, los futbolistas se han levantado en armas y han dicho que no. No están dispuestos, al menos por el momento, a tener que pagar con su salario por las malas artes económicas del club durante muchos años.
Por ello, tanto el primer como el segundo equipo decidieron enviar un burofax a la directiva para comunicarles su decisión y que la misma no era negociable, ya que Bartomeu había abierto varios plazos de negociación para tratar con la plantilla de cuánto sería y cómo sería esta rebaja, plazos que le han terminado sobrando.
Apoyan al club
Sin embargo, tal y como informa Catalunya Radio, el caso ha sufrido un giro dramático, y es que tres futbolistas de la primera plantilla del Barça habrían decidido desmarcarse del resto de sus compañeros, negando ese rechazo a la rebaja salarial propuesta por el club, algo que sin duda a punta a una división del vestuario.
Marc-André Ter Stegen, durante un partido de esta temporada
Estos jugadores serían tres componentes muy importantes de la primera plantilla: Frenkie De Jong, Lenglet y Marc André Ter Stegen. Estos tres jugadores han decidido desmarcarse del resto de sus compañeros y estarían dispuestos a aceptar las medidas que el club considere necesarias tras haber perdido más de 200 millones de euros en ingresos. Para ellos, la rebaja del 30% del salario estaría justificada y sería una medida que estarían dispuestos a acatar.
La idea del club no es eliminar esa parte del sueldo de sus jugadores, sino aplazar su pago hasta que la situación se normalice y pueda llegar el momento en el que los jugadores vuelvan a recuperar el total de su ficha tal y como estaba antes de la crisis. Sin duda, un gesto de apoyo al club de tres jugadores que no habrá gustado para nada en el vestuario, especialmente en el momento que mayor confrontación hay con la junta directiva tras la salida de Luis Suárez y el escándalo del caso Messi.
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