La crisis económica por la que pasa el FC Barcelona ha tocado fondo al final de este 2020. No solo el coronavirus, si no también la mala gestión de Josep María Bartomeu han provocado una situación límite que, según ha reconocido Carles Tusquets, presidente de la Junta Gestora que está a cargo del club hasta las próximas elecciones de enero, los jugadores no van a cobrar en este mes de enero. Las negociaciones que han llevado a cabo para rebajar un 40 por ciento los salarios han desembocado en esta decisión.
El aplazamiento de pagos que ha realizado la Junta Gestora era clave porque económicamente el Barça no podía asumirlo. "En el mes de enero no se pueden pagar las nóminas. Es una situación de insolvencia. Los jugadores tienen dos partes de sueldo, en enero y julio. Se ha aplazado la de enero. También otros emolumentos previstos, como el tema de primas por títulos", explicó Tusquets en una entrevista en RAC 1 en la mañana de este jueves.
Además, detalló los entresijos de esta rebaja. "El acuerdo que tenemos actualmente nos permite acabar la temporada sin problemas de tesorería. Esta temporada está salvada. Hubo una parte de rebaja salarial con la anterior Junta. Lo que hicimos nosotros fue posponer una parte y distribuirlo en las próximas cuatro temporadas de media. Algunos de más y otros de menos", argumentó la cara visible de la Gestora que está al mando del Barça hasta finales del mes de enero.
El Barça, tradicionalmente, divide los pagos a los jugadores entre los meses de enero y junio, a mitad y al final de temporada. El objetivo de la próxima junta directiva será asegurar ese próximo pago para que el acuerdo al que han llegado entre los jugadores y la Gestora siga su curso. La situación es tan límite que Tusquets la ha calificado como "pésima, preocupante", pero la cabeza visible del club en este momento afronta la situación con optimismo de cara al futuro.
El acuerdo
La semana pasada Tusquets consiguió salvar un desenlace que parecía inevitable de concurso de acreedores. La Comisión Gestora ha conseguido sofocar la división con el vestuario y ambas partes han alcanzado un principio de acuerdo para la famosa rebaja salarial. El Barça debía reducir un total de 190 millones de euros su masa salarial. Unas cifras que no se han alcanzado tras las negociaciones y que quedará reducida a 122 millones de euros de los salarios fijos y otros 50 variables que recibirán los jugadores en los próximos tres años.
Todo esto ha ocurrido en medio de una carrera electoral que acaba de comenzar. Con la fecha del 24 de enero ya confirmada, los precandidatos afrontan este proceso con una pequeña tranquilidad con respecto a la situación financiera. Aún así, tendrán que presentar a los socios un proyecto que vuelva a relanzar unas cifras de ingresos que esta temporada han recibido una caída de más de 300 millones con respecto a la última temporada.
No es el mejor momento para aspirar a la presidencia del Barça, ya que ahora tendrá que cumplir con este acuerdo que elevará la deuda para los próximos años de cara a salvar una situación límite. Con estos detalles, la Junta Gestora ha cumplido con los dos objetivos que llegó a afrontar el poder. Ahora, tendrá la carga extra de valorar si hacer alguna inversión en el mercado invernal a pesar de que las cuentas estén en rojo.
[Más información: Tusquets: "Habría vendido a Messi en verano"]