Que el examen que hizo Luis Suárez para obtener la nacionalidad italiana fue una farsa es ya una realidad. Este viernes se ha anunciado la suspensión de los profesionales y docentes implicados en la prueba del delantero uruguayo, es decir, la Rectora, el Director General y los profesores de la Universidad para Extranjeros de Perugia. Todos ellos han sido inhabilitados de sus respectivos cargos por ocho meses.
Luis Suárez trató de obtener la nacionalidad italiana este verano para poder fichar por la Juventus de Turín. El charrúa, al que Ronald Koeman le dijo que debía buscarse un nuevo equipo, solo le faltaba la nacionalidad para poder tener un hueco en la plantilla bianconera ya que el club tenía completo el cupo permitido de futbolistas no comunitarios. Entonces se presentó a un examen de italiano que acabó siendo un fraude.
Suárez aprobó aquel examen, pero luego salió a la luz que los examinadores habían pactado con él las preguntas y respuestas del examen y hasta le llegaron a asignar las calificaciones antes de realizarse la pruebra. La fiscalía de Perugia investigó el caso, saliendo a la luz varias conversaciones telefónicas de los examinadores que probaban el fraude del examen del delantero uruguayo.
"¿¡Pero cómo le vamos a suspender!?", decía la profesora Stefania Spina. "¡He llamado a Rocca [Lorenzo Rocca, el examinador] y hemos acordado el examen! Hoy doy mi última clase y me la tengo que preparar porque no dice ni una palabra. Aprobará porque con 10 millones por temporada de salario no puedes no aprobarle porque no tenga el B1...", seguía la intervención de Spina.
Luis Suárez no estaba entre los investigados pero sí la rectora Giuliana Bolli Grego, el director general de la universidad Simone Olivieri, la profesora Stefania Spina, el examinador Lorenzo Rocca y la secretaria Cinzia Camagna. Los cuatro primeros han sido suspendidos por la farsa del examen por el Ministerio Público y la Unidad de Policía Económica.
Las sospechas empezaron a salar cuando tras el examen todo fueron fotos, sonrisas y abrazos además del agradecimiento de la rectora a Suárez por una prueba que duró apenas unos minutos en lugar de las habituales dos horas y media.
El plan de Suárez era fichar por la Juventus, pero aunque aprobara el examen los plazos eran muy apretados y tuvo que desechar dicha opción. Al final fue Álvaro Morata el delantero que recaló en el conjunto bianconero y Luis Suárez ocupó su lugar en la punta de ataque del Atlético de Madrid de Diego Simeone.