141 personas aisladas y en cuarentena. 37 casos positivos por la Covid-19. Y una crisis deportiva y sanitaria que ha acaparado toda la actualidad en Asturias. El 'caso Sporting' ha estallado justo antes de la tercera ola de la pandemia y tras las restricciones impuestas en toda España en plenas fechas navideñas. Tal ha sido su impacto que se ha convertido en el tema más preguntado a las autoridades asturianas. No afecta solo a jugadores del conjunto de Gijón, sino que los contactos y la expansión del virus han multiplicado la relación de casos positivos.
Todo se remonta a las principales fechas de Navidad. El 21 de diciembre y el posterior 24. Primero, con una reunión en casa de uno de los jugadores tras el duelo disputado ante el Leganés. Luego, con un encuentro en uno de los locales del Grupo Gavia, al que pertenece el vicepresidente del mismo Sporting, Javier Martínez. Manu García y Nacho Méndez, jugadores del cuadro de El Molinón, estuvieron presentes.
El caso está siendo investigado a nivel sanitario por las autoridades del gobierno asturiano. Pero también se está analizando por si se han producido incumplimientos de protocolo. La Policía trabaja en ello y LaLiga también ha abierto una investigación interna para conocer todos los movimientos de las últimas fechas.
Las contradicciones
El Grupo Gavia ha intentado explicar su versión de los hechos por medio de dos comunicados. En su contra están los vídeos que se han filtrado, en gran cantidad, en las redes sociales. Vídeos en los que se puede comprobar que el evento tuvo lugar el 24 de diciembre entre carteles de "Feliz Navidad", que no se utilizaba mascarilla durante todo el tiempo y donde la distancia interpersonal que se debe tener brilla por su ausencia. El local Bellavista es el lugar donde se reprodujeron los hechos.
El primero de sus comunicados tuvo lugar el mismo domingo 3 de enero. La empresa negaba que se tratara de una "fiesta privada". "En Bellavista no se ha organizado ninguna fiesta privada durante todo el tiempo que estamos sufriendo esta dolorosa pandemia, ni por supuesto se organizará mientras estemos sufriendo esta situación", apuntaban. La clave está en que defendían que se había abierto el local en el horario habitual "cumpliendo todas las medidas de seguridad sanitarias".
Menos de 24 horas después, y tras el revuelo generado también a nivel político, el grupo hostelero emitía un nuevo comunicado. Y en este modificaban notablemente su primera nota oficial en la que defendían que las medidas sanitarias habían sido respetadas en todo momento. El Grupo Gavia, aunque negaba que los jugadores del Sporting se hubieran contagiado en su local, reconocía por primera vez que "hubo clientes que incumplieron las normas de seguridad y algunos fueron expulsados del recinto y advertidos".
Además, las imágenes que circulan en redes y que muestran a grupos de más de seis personas posando juntos y sin mascarillas, según el Grupo Gavia, se produjeron después de que "varias mesas de amigos de un jugador" decidieron juntarse "para sacar una fotografía en un momento puntual, incumpliendo las normas de la sala" y siendo "apercibidos por ello". Para defender su postura, han publicado un vídeo donde las mesas aparecen con grupos de cuatro personas y a la distancia pertinente. Sin embargo, se puede comprobar cómo gran parte de los presentes no lleva la mascarilla aunque no esté consumiendo en el instante de la grabación.
Expansión e investigación
Al poco de conocerse el brote en el Sporting, el presidente de Asturias adelantó Salud Pública llevaba varios días "analizando y realizando el estudio epidemiológico" de los contagios relacionados con el club de fútbol. Además, subrayaba que "con total transparencia" se iría dando toda la información obtenida. Y así ha sido al inicio de la semana.
Rafael Cofiño, director general de Salud Pública, y María José Villanueva, encargada del equipo de rastreadores del gobierno autonómico, atendían a los medios de comunicación con el 'caso Sporting' como principal tema a tratar. Fuentes del gobierno regional, contactados por EL ESPAÑOL, han evitado hacer declaraciones más allá de las aportadas en la conferencia de prensa. En ella confirmaban los datos de 141 personas aisladas y 37 positivos confirmados. De ellos, diez se han dado en el conjunto asturiano.
Villanueva confirmó que las cadenas de transmisión detectadas son "de índole fundamentalmente social", lo que encajaría en lo visto en las imágenes. A pesar de existir algunos casos producidos en el entorno domiciliario, Villanueva indicó que había un "entorno preocupante de relaciones sociales" producidos en domicilios particulares o en locales hosteleros. Una versión que también sería coherente con la posible reunión que tuvo en un domicilio el día 21 y con las imágenes del día 24 en el Bellavista.
Pero la gravedad de la situación no ha quedado ahí. Debido al movimiento habitual que hay en Asturias, al tamaño de la región y a los principales centros de actividad social, los contagios podrían haber llegado a Avilés. "Puede haber un vínculo intermedio en las cadenas de transmisión de personas que comparten ambos focos", ha indicado la coordinadora de los rastreadores. El brote del colegio de Avilés afecta a 46 personas.
Lo que falta por aclarar es si hay casos de la cepa británica, considerada más contagiosa. Aunque el Sporting de Gijón, en un comunicado donde defendía que los contagios se produjeron fuera de Mareo, adelantada que "los test" que se realizaron descartaban que los positivos "pertenezcan a la denominada cepa británica", en el Principado no han sido tan tajantes: "No estamos en situación de descartarlo taxativamente".
Por todo ello, la Policía, a petición de Delegación de Gobierno, ya investiga lo sucedido. En el centro de la investigación está si se cumplieron o se incumplieron las medidas sanitarias en lo que respecta a concentración de grupos sociales.
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